Antonio Espinoza Jaque deberá cumplir una pena de dos años de presidio con el beneficio de la libertad vigilada, al ser declarado autor del delito de lesiones graves cometidas en un campeonato de fútbol interempresas en contra de un jugador del equipo rival.
El fiscal Paulo Rodríguez explicó que "el imputado agredió al integrante del otro equipo con un golpe de codo en su boca en una situación completamente alejada de una jugada de fútbol. La víctima perdió dos dientes y quedó con otros dos sueltos. Se descartó la teoría de la defensa de que se habría tratado de golpes o roces propios de un partido de fútbol".
Además, la fiscalía presentó durante el juicio el testimonio del padre del afectado, del árbitro del encuentro y los informes periciales que acreditaron la lesión.
El hecho ocurrió el 9 de septiembre del año 2006, alrededor de las 21:30 horas mientras se desarrollaba un partido de fútbol en el Estadio Sur de Talca.
"Sin provocación previa, el imputado agredió intencionalmente con un golpe de codo al jugador del equipo adversario R.E.A.E. , provocándole un traumatismo dentario en las piezas 8, 9, 24 y 25 y una contusión en el labio superior, lesiones cuyo tiempo de sanación fueron superior a treinta días", establece el fallo.
Raúl Antonio Espinoza Jaque quedó sujeto al control de la sección de tratamiento del medio libre de Gendarmería y además deberá pagar las costas del caso.