Durante esta jornada se decidió el destino judicial de Guillero Esteban González Moya, considerado culpable del delito de homicidio simple del joven neonazi Marco Antonio Briones Castillo.

En tanto, la justicia resolvió absolver a Matías Isaías Barrios Arredondo por la figura de homicidio frustrado.

En marzo de 2007, en Plaza Italia, el imputado esperaba abordar un bus que lo trasladaría a Chillán para presenciar un partido de Colo-Colo. En ese momento apareció un grupo de neonazis, desatando la descomunal pelea que también dejó a otro joven gravementre herido.

La audiencia de comunicación de sentencia se realizará mañana miércoles a las 20 horas, y estará a cargo de la magistrado Olga Fernández Berardi.