La Confech puso exigencias. Los estudiantes universitarios condicionaron a cuatro puntos el futuro encuentro con el ministro de Educación Harald Beyer, quien ya ha manifestado su intención de dialogar con los estudiantes.

El vocero de la Confech y presidente de la Fech, Gabriel Boric, indicó que necesitan ver "gestos" del titular de la cartera para concretar un encuentro que facilite el diálogo.

El primer punto que entregan como condición  es la reintegración de los secundarios a sus colegios, luego de que las matrículas fueran canceladas por participar en el movimiento estudiantil durante el año pasado.

Boric llamó al ministro a "hacerse cargo" de la situación y no hacer "caso omiso" a la actitud del alcalde de Providencia, Cristián Labbé, "que es de la UDI, partido que pertenece al gobierno y el ministro es funcionario de gobierno".

La segunda condición es que se terminen "las amenazas y hostigamientos" a los estudiantes secundarios que finalmente fueron reintegrados a los colegios, pero condicional y sin el derecho de participar en el Centro de Alumnos.

"Es fácil decir que se quiere dialogar con la prensa, pero en la práctica va cortándole las piernas al movimiento", afirmó Boric.

Por otro lado, los universitarios exigen que el secretario de Estado se refiera al crédito Corfo. "Tenemos a los endeudados que el gobierno los pretende ocupar como moneda de cambio para legitimar la reforma espuria al CAE, no queremos cambiar deuda por deuda, no se trata de oponernos a todo lo que venga del gobierno, no es nuestra intención, pero sí nos opondremos a medidas que profundicen el endeudamiento".

La Confech sugiere tomar medidas con respecto a la tasa de interés de este crédito, ya que "rebajar la tasa del CAE de 5,6% a 2%, en cinco años la deuda se mantendrá porque los aranceles seguirán subiendo".

En tanto, la líder de la Universidad de Valparaíso, Marjorie Cuello, indicó que el cuarto punto responde a no aprobar la Ley sobre Orden Público, que modifica disposiciones del Código Penal. La dirigente asegura que es "inconcebible" actuar con más represión en la movilización.