La Confederación de Funcionarios de la Salud Municipalizada (Confusam), en una asamblea nacional en Santiago, acordó llamar a sus bases para que se "mantengan en estado alerta permanente con el fin de hacer presión y evitar que se siga avanzando hacia la privatización de la salud".

La entidad sindical expresó que el nuevo Gobierno "en su primer mensaje presidencial, anunció con bombo y platillo un conjunto de medidas orientadas a la privatización de la salud pública".

Agregó que esto se desprende del anuncio gubernamental de un 'Bono AUGE', que significaría "la compra de prestaciones sanitarias a empresas de salud privadas bajo el pretexto de terminar con las Listas de Espera que el sistema público es incapaz de resolver producto de la insuficiencia de recursos financieros, humanos y materiales en que ha sido sumida desde los tiempos de la dictadura y que fuera mantenida durante los cuatro gobiernos de la Concertación".

La asamblea de la entidad rechazó también "el modelo de concesiones de infraestructura sanitaria a privados".

La Confusam expresó que existe "una sospechosa tendencia sistemática de algunos actores a estigmatizar de manera reiterativa a los servicios públicos de salud, conducta claramente instrumental a los objetivos de aquellos que aspiran a hacer de la salud un área de negocios altamente lucrativos".