Este miércoles la Cámara de Diputados aprobó y el proyecto de ley de reforma a la educación superior, iniciativa que establece -entre otras disposiciones – la gratuidad universal y las condiciones para llegar a ella.

Con esto, el Congreso despachó la normativa.

El proyecto, además de la gratuidad, establece la acreditación obligatoria y fija las tareas y procedimientos de la Superintendencia de Educación que también fiscalizará los aspectos por los que se les entregó la acreditación a la institución.

"Yo creo que Chile hoy es mejor que ayer. Contar con una ley de educación superior que da garantía que podrán estudiar en instituciones acreditadas y la calidad será lo que irá importando", dijo la ministra Adriana Delpiano a la salida de la votación.

Y agregó: "Tenemos calidad, una buena fiscalización, gratuidad y un marco regulatorio que mejore las relaciones entre las distintas instituciones de educación superior. Aquí hay intendencias, subsecretarías para velar por esto, miraremos el futuro con más posibilidades".

Para el ministro de la Segpress, Gabriel de la Fuente, dijo que "el Parlamento ha estado a la altura de los desafíos y de las demandas de la ciudadanía en una materia tan relevante como es la educación de nuestros hijos y nuestros jóvenes. Por eso mismo, agradecemos a los parlamentarios por su votación casi unánime de este proyecto, que ahora va a tener que ir a control preventivo de constitucionalidad".

La reforma, que fue aprobada ayer en el Senado, contó con el voto favorable de la diputada Camila Vallejo, ex dirigenta estudiantil. "Lo que salió ayer del Senado significa un avance. Si no se aprobaba hoy el proyecto íbamos a la comisión mixta y dejábamos al futuro gobierno la tramitación de la iniciativa, con un ministro (Gerardo Varela) que ya sabemos no cree en nada de esto".