Congreso lanza nuevo disco en octubre y reedita en vinilo una de sus obras más aclamadas

"Este disco nuevo, no es uno más para Congreso. Tenemos 47 años en la música, y que todavía estemos creando canciones y música nueva es muy importante para nosotros. Hay un ánimo increíble en el estudio, nos dan ganas de estar ahí tocando horas y horas". El baterista Sergio "Tilo" González cuenta entusiasmado la presente rutina de su conjunto, tras beber el primer sorbo de café, destellando una extraña mezcla entre humildad casi franciscana y un talento aún arrollador.

Todo como resumen de un plan mayor: el nuevo álbum de su banda, el primero tras Con los ojos en la calle (2010), y que ya está grabado casi en su totalidad. Además, tiene fecha de estreno para octubre y el nombre tentativo de La canción que te debía. 

"Son tipos de composiciones que quizás no abordamos en otros discos. Por ahí hay una baguala, un tango. Todas canciones nuevas y originales, y los textos también. El título lo dice un poco, son cosas que quedaron pendientes, son pequeñas deudas que teníamos", relata uno de los más brillantes percusionistas del cancionero nacional.

Como síntoma de una vitalidad imperecedera, Congreso no sólo alista nuevo disco, sino que también está trabajando en la reedición en vinilo de uno de sus trabajos emblemáticos, Terra incógnita (1975), el que por esos años empezó a perfilar su estatura de clásico de la música chilena. De hecho, en ese trabajo rebosan las influencias sonoras latinoamericanas y andinas que la banda había plasmado en su primer LP, El Congreso (1971), en donde dominaba el encanto primario de sus integrantes por el rock. Cuatro años después, la banda abrazaría otras propuestas mucho más complejas, como la fusión y el jazz, completando el característico mestizaje que siguen prolongando hasta hoy.

Para celebrar estos dos acontecimientos, los oriundos de Quilpué preparan un show en el Teatro Oriente para el viernes 29 de este mes (entradas en Puntoticket). "En una primera parte de ese concierto vamos a tocar entero Terra incógnita. El vinilo estará a la venta ahí. En la segunda parte vamos a mostrar temas nuevos del próximo disco", detalla el también profesor de producción musical y batería.

Por otro lado, hay una rúbrica clásica de la historia de los hombres de En todas las esquinas. A largo de sus 47 años, han visto partir a más de uno de los suyos, pero también llegar a otros que ocupan tales vacantes. En la actualidad, al grupo lo forman dos de los fundadores: el propio González y otro histórico, el cantante y compositor Francisco Sazo. Otro integrante con recorrido es el flautista Hugo Pirovich, quien se sumó al elenco en 1971. Además, están los más jóvenes: Jaime Atenas (saxo), Sebastián Almarza (piano), Raúl Aliaga (percusión) y Federico Faure (bajo).

Las claves para la supervivencia las entrega el propio baterista de 63 años: "Quedamos estos tres ancianos (risas) y la camada más joven. Lo que nos mantiene como banda es la amistad. Hay un poco lo que nos quedó de la época de hippie, de comunidad de hermanos, de respetar al otro. También ninguno de nosotros se cree el líder, siempre hay espacio para la opinión, nadie impone nada".

Ante los planes inmediatos que los esperan, "Tilo" dice que, por ahora, no barajan el retiro de los escenarios como una opción cercana. Es más: aún la ven como una situación muy distante. "A veces uno siente que las cosas no fluyen, y se cuestiona si valdrá la pena, pero un anónimo cualquiera te recuerda que sí vale la pena continuar. Se acerca y te dice 'oye esa canción del año tanto me salvó la vida, porque yo estaba en tal momento'. Y ahí tu dices ¡wow! Bueno, no ha sido en vano, a alguien ayudamos (se ríe)".