Sólo 9 días hábiles tiene el Congreso para aprobar la Ley de Presupuestos de 2014. Por ello, ayer, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, se reunió con los integrantes de la Comisión Especial Mixta del erario para determinar los pasos a seguir ante el estrecho escenario poselección presidencial.

La idea es que de aquí al jueves se trabaje hasta el total despacho de las partidas para que la próxima semana sea votado en sala. En paralelo ingresaría el reajuste del sector público. 

"Tenemos 9 días hábiles para despachar el presupuesto y eso significa que hay que pasar en el extremo cinco trámites: mixta de Presupuestos, primer trámite Cámara Baja, segundo trámite Senado, tercer trámite en la Cámara y, eventualmente, mixta", detalló el ministro Larraín. "Tenemos poco tiempo", reconoció el senador y presidente de la mixta, Andrés Zaldívar (DC).

De ahí que, para acotar el debate, gobierno y oposición están tratando de acercar posiciones. En tal sentido, Larraín dijo que están disponibles para conversar, "entendiendo que hay acuerdos globales, no parciales, donde entendamos que los tiempos son acotados y, por ende, las discusiones no pueden ser infinitas".

De hecho, el gobierno estaría dispuesto a revisar el fondo de libre disposición por US$ 600 millones que heredará la próxima administración. El diputado Pablo Lorenzini (DC) dijo que la oposición buscará elevar esa cifra a US$ 700 millones, y añadió que se debe dotar de un mayor presupuesto a los organismos contralores, como las superintendencias y el Sernac.

En lo que no habría acuerdo es en la revisión de la proyección para el PIB del próximo año, fijada en 4,9%. Y es que la oposición teme que la expansión se sitúe más cerca de 4,0% e incluso menos, lo que les restaría capacidad de maniobra. Desde el oficialismo suscriben la tesis del ex ministro de Hacienda Hernán Büchi, quien manifestó que con la regla fiscal lo importante es el PIB de tendencia, que es 4,9%, por lo que no sería prudente revisar la cifra, ya que, de hacerlo, habría un mayor gasto fiscal.

Lorenzini evalúa, incluso, la posibilidad de revisar la iniciativa si no se corrige el guarismo. "Veremos en marzo cómo nos organizamos y financiamos los próximos meses, porque una reforma tributaria tardará en entrar en vigencia", dijo.

Otros tópicos que abordarán son los US$ 1.400 millones del fondo para la educación pública municipal, que no se ha usado, y los avances concretos de la reconstrucción. Según el senador José García Ruminot (RN), salud también será analizada y se buscaría elevar los recursos involucrados. Pese a que considera que la ley podría ser aprobada al borde del plazo, confía en que se alcanzará un acuerdo en los temas clave.