Durante toda la compleja campaña de Palmeiras en el Brasileirao, en el cual la zona de descenso los ha acechado más de la cuenta, jugaron de local en el estadio Pacaembú, porque su nuevo recinto estaba en construcción. En 2010, el mítico Palestra Italia fue demolido, para que al año siguiente comenzara a levantarse uno más actual. Y la espera terminó.
El elenco de Jorge Valdivia cumplió cien años en 2014, y como símbolo de la celebración está pronto a inaugurar oficialmente el Allianz Parque, considerado el estadio más moderno de Brasil.
Con un costo de 500 millones de dólares, este miércoles será el primer partido oficial del campo patrocinado por la aseguradora alemana (al igual que el de Bayern Munich), en el cual Palmeiras recibirá a Sport Recife, por la fecha 35 del certamen local (a las 21.00 horas de Chile). El estadio tiene una capacidad para 43.600 espectadores, 160 cabinas (para 2.800 personas), un anfiteatro para 12.00 personas, área de prensa para mil profesionales, restaurantes, suites de lujo, 15 ascensores y un centro de convenciones.
Pese a su imponente estructura y modernidad, no fue considerado como alternativa para el Mundial, a diferencia de estadios que llegaron a la Copa del Mundo sin terminar, como el Arena Corinthians, en el cual fueron instaladas cerca de 13 mil ubicaciones temporales, por el derrumbe de una grúa durante la última fase de construcción, que obligó a un retraso que complicó a la FIFA.
El nuevo hogar del "Verdao" es una arena multiuso, lo que hace que sea apta no sólo para el fútbol, sino que para espectáculos de todo tipo. De hecho, Paul McCartney se presentará el próximo 25 de noviembre.
Además, el sitio español El Gol Digital lo sitúa como el estadio más espectacular del último tiempo, superando al nuevo Velodrome del Olympique de Marsella, o estadios que fueron sedes del Mundial, como el Beira Río de Porto Alegre o el Arena Pantanal de Cuiabá.
Así, la "magia" de Jorge Valdivia tendrá otro escenario en el cual destacar.