El Consejo del Banco Central decidió por unanimidad bajar en 25 puntos la Tasa de Política Monetaria (TPM) en abril, aunque también evaluó la opción de mantenerla en 3%, mostró este miércoles la minuta de la última reunión.
Los consejeros acordaron bajar la tasa de interés a un 2,75%, como esperaba una parte del mercado, aunque moderaron el sesgo expansivo de la política monetaria.
La División de Estudios planteó dos opciones: mantener la TPM en 3% o bajarla en 25 puntos, a 2,75%. En ambos casos se sugería mantener un sesgo a la baja que, no obstante, considerara que, después de los recortes de los últimos meses, todo indicaba que se estaba cerca del límite de expansividad coherente con el escenario base.
En cuanto al escenario de actividad local, varios consejeros consideraron que en líneas generales, se seguía en un escenario de debilidad de la actividad como el planteado en el Ipom. No obstante, indicaron que, más allá de la esperada caída de la actividad minera por la huelga en Escondida, el desempeño de los sectores no mineros había sido mejor de lo esperado.
Todos los consejeros llamaron la atención sobre el deterioro del mercado laboral y los potenciales efectos negativos sobre el consumo de persistir estas tendencias. Varios de ellos destacaron que la caída del empleo asalariado había sido generalizada en términos de su origen sectorial, aunque parcialmente compensada con el aumento del empleo por cuenta propia.
Varios Consejeros se refirieron a la desaceleración de los salarios nominales. Un Consejero se mostró preocupado porque la combinación de una contracción del empleo asalariado y una desaceleración de las remuneraciones nominales solo era comparable con lo visto en períodos de una mucha mayor debilidad económica que la actual, como la recesión del 2009 y la de fines de los noventa.
Respecto a la inflación, todos los consejeros coincidieron en que las cifras de marzo habían estado en línea con la trayectoria prevista en el Ipom.