Un día ha pasado desde que se reanudaran los combates en Alepo entre los soldados del régimen y los insurgentes, donde las esperanzas de una evacuación rápida de miles de civiles hambrientos son cada vez menores.

Y es que el acuerdo para la evacuación fue suspendido debido a objeciones del régimen sirio, según señalaron a la agencia AFP un responsable rebelde y un cercano al gobierno. Según los rebeldes, el régimen y sus aliados, principalmente los iraníes, "impusieron nuevas condiciones" al acuerdo, mientras que la fuente próxima al poder subrayó que Damasco había expresado su desacuerdo sobre el elevado número de personas que debían ser evacuadas.

La fuente cercana al gobierno de Bashar Assad sostuvo que "Damasco además quiere una lista de nombres de todos los que van a salir para estar seguros de que no hay rehenes o prisioneros". 

El acuerdo de evacuación habría permitido a los miles de civiles que lo desearan abandonar las últimas posiciones de los rebeldes en la ciudad del norte, donde llevan sitiados desde hace más de cuatro meses por el ejército, privados de medicamentos, servicios básicos y alimentos.

Por otra parte, durante esta mañana, al menos siete civiles murieron por disparos rebeldes contra dos barrios en los que el gobierno tiene presencia.

El principal aliado de Assad, Rusia, acusó por su parte, a los rebeldes de haber comenzado con las hostilidades tras varias horas de tregua. Turquía, que está en el lado opositor, culpó al régimen y a sus aliados.

Una pérdida de Alepo, su principal bastión en Siria y símbolo de la revolución, marcaría el fin de la rebelión en esta ciudad, cuya parte este controlaban los insurgentes desde 2012.

En cambio, la derrota de los rebeldes supondría la más importante victoria del poder desde el comienzo de la guerra, en 2011.

Hasta el momento, cientos de civiles han muerto y cerca de 130 mil han tenido que abandonar sus hogares desde que comenzó la ofensiva del 15 de noviembre.

EMERGENCIA TOTAL

La presidenta de Médicos del Mundo, Françoise Sivignon, manifestó que "Alepo está en una situación de emergencia absoluta". Y agregó que "unas cien mil personas están atrapadas en un territorio de cinco kilómetros cuadrados".

En cuatro semanas, la operación militar en Alepo ha costado la vida a más de 463 civiles en el este de Alepo, según el OSDH, mientras que 130 civiles han fallecido en el oeste de la ciudad.

El conflicto en Siria ha dejado, desde marzo de 2011, más de 310.000 muertos y forzado a más de la mitad de la población del país a abandonar sus hogares.