El viernes, la huelga de Escondida completará 30 días, finalizando el período que se fijó la empresa para detener su producción. En ese escenario, la minera controlada por BHP Billiton ya baraja la posibilidad de retomar sus labores, produciendo con trabajadores contratistas.

Actualmente, y de acuerdo a cifras de la empresa, Minera Escondida cuenta con 13.303 contratistas, incluyendo los que operan en sus proyectos de la segunda planta desalinizadora, y el proyecto de extensión de Los Colorados.

El poco probable escenario de que la minera llegue a un acuerdo con el sindicato n°1 de trabajadores en las próximas horas, obliga a la firma a acudir a mano de obra que permita retomar la producción. Las empresas contratistas saben que deben prestar el servicio en caso de ser requerido, pero antes piden que se definan ciertos aspectos para garantizar su presencia.

"Las empresas tienen la obligación de dar el servicio, eso no está en cuestionamiento. Lo que hay que ver es de qué manera, una vez que Escondida requiera el servicio, se pueda cumplir", sostuvo Cristián Aguayo, abogado y socio del estudio Aguayo, Ecclefield & Martínez, y que además representa a dos empresas contratistas que prestan servicios para la mina, que involucra a alrededor de 300 trabajadores.

Los plazos y las condiciones en las que el servicio se prestará es vital para que los contratistas puedan coordinar el movimiento de sus trabajadores, puesto que la gran mayoría vive fuera de la Región de Antofagasta, y otros se encuentran de vacaciones. "Más que en cuestionamiento diría que está en duda. A raíz de lo mismo, al menos en el caso de mis clientes les recomendé solicitar precisión para no tener que interpretar, porque estos puntos no están resueltos, es muy casuístico", sostuvo Aguayo.

La preocupación de los contratistas por la definición de la empresa respecto de cuándo va a necesitar a los trabajadores radica en que los contratos entre ambas son poco específicos en estos aspectos. "Estas problemáticas, con este nivel de precisión no están resueltas en los contratos comerciales, porque este regula situaciones más genéricas que estás, que son más específicas", dijo.

Aguayo agregó que a la fecha no existe ninguna información oficial por parte de Minera Escondida respecto de la necesidad de retomar la operación con sus servicios.

Costos y bloqueos

Otro aspecto que no definen los contratos es sobre quién debe asumir el costo del traslado de los trabajadores, y de hospedaje, en caso que sean convocados varias horas previas al inicio de la producción.

"Una alternativa sería traerlos y mantenerlos en hostales o residencias en Antofagasta, pero un tema a resolver es quién se hará cargo de ese costo", afirmó Aguayo.

El abogado sostuvo que al no definir con precisión este tipo de situaciones, los contratos quedan expuestos a la interpretación.

El director ejecutivo de Plusmining, Juan Carlos Guajardo, tiene también dudas respecto del efecto que tendrá en la producción el reinicio de obras con trabajadores contratistas.

"En primer lugar está el hecho de que estos trabajadores no cuentan con la experiencia de los trabajadores regulares, y puede tener impactos en productividad. Tal vez con dificultades en que los equipos y procesos no funcionen a tiempo, y otros aspectos operacionales", señaló.

Para Guajardo existe otro punto a considerar en caso que Escondida decida reiniciar su producción con trabajadores contratistas; los bloqueos que pueda realizar el sindicato apostado fuera de la faena, que impidan concretar los planes de la minera de BHP Billiton.

"Queda ver si logísticamente la empresa logra implementar el traslado y despliegue de los trabajadores contratistas en la faena", señaló.

De todas formas, la empresa no estaría dispuesta a reiniciar las faenas en Minera Escondida si no se cuenta con los niveles de seguridad que corresponden para los trabajadores y los equipos.