En Copiapó, capital de la Región de Atacama, hay 31 médicos en total, de los cuales 10, es decir un tercio de su dotación, no podrán seguir trabajando en la Atención Primaria de Salud (APS), consultorios y centros comunitarios de salud familiar, porque no aprobaron el Examen Unico Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom), que los habilita para trabajar en el sistema público.
Así se determinó hace dos años, cuando el gobierno junto al Colegio Médico y la Asociación Chilena de Municipalidades (ACHM), identificaron que había 1.111 profesionales, principalmente titulados en el extranjero, sin haber aprobado Eunacon. Dicha prueba es requisito para ser contratado en el sistema público de salud y para entregar atenciones Auge/Ges, por lo mismo se les otorgó dos años para regularizar su situación y evitar una salida masiva de galenos de la red pública.
Los médicos de Copiapó son parte de los 277 profesionales que ejercen en centros de salud públicos en 110 comunas y que el próximo 14 de febrero, tendrán que dejar sus puestos.
El Centro de Salud Familiar de Paipote, parte de la comuna de Copiapó, tiene cuatro médicos y dos de ellos reprobaron el examen y tendrán que dejar sus puestos. Más complejo es el caso del Consultorio Rosario, del mismo sector, donde los dos médicos que atienden tendrán que abandonar sus funciones por haber reprobado el test.
"Tener un tercio menos de médicos es una situación realmente dramática. Diez no van a poder continuar lamentablemente", explicó el alcalde de Copiapó, Marcos López.
Uno de ellos es Camilo Navarro. Médico general, chileno formado en Venezuela, quien llegó al Consultorio de Paipote en abril de 2014. Rindió la prueba tres veces y en todas la reprobó.
"¿Ustedes se preguntan por qué reprobé? con la carencia de médicos que hay nos toca trabajar de ocho a ocho y además, con turnos en los Servicios de Atención de Urgencia, porque no podemos dejar sin atención a los pacientes. El poco tiempo restante lo usaba para estudiar", explicó Navarro.
El alcalde López indicó que ante la grave situación, se está recurriendo a buscar profesionales en otras regiones y además, se verá la posibilidad de que el concejo apruebe recursos extra para entregar incentivos a aquellos médicos que quieran trabajar en la región.
Otra de las comunas afectadas por el éxodo de médicos es San Ramón en la RM. Ahí, de los 35 médicos que hay en la comuna, seis no aprobaron su Eunacom, de los cuales cinco pertenecen al Consultorio La Bandera, que cuenta con un total de 10 profesionales, es decir, tendrán una merma del 50% de su dotación.
Juana Casillas, jefa del Departamento de Salud de la comuna, junto con mostrar su preocupación por la situación, indicó que ya están revisando currículum para poder suplir las carencias.
"En este caso, vienen a llenar el espacio de los profesionales que no pasaron este examen de conocimiento médicos", dijo.
Según Manuel Araneda, vocero de la Asociación Chilena de Médicos Extranjeros, las comunas más afectadas serán "las más pobres de Santiago y del país".
El presidente de la Asociación de Municipalidades ACHM, Felipe Delpin, indicó que, pese a que el 14 de febrero los médicos deben dejar sus puestos, es probable que los alcaldes los mantengan.
Es lo que hará el alcalde de Isla de Maipo, Carlos Adasme, quien perderá a siete de los 14 médicos que trabajan en sus consultorios. Sin embargo, Adasme es tajante en cuanto a las medidas a tomar. "No vamos a expulsar a estos médicos, porque el gran problema del sistema de salud público es que no tenemos más médicos chilenos para contratar".
Delpin advierte que esa medida será tomada por varios ediles, por lo menos hasta abril, que es cuando el gobierno destinará médicos en Etapa de Destinación y Formación de Especialidad, que serán asignados a los sectores más afectados por el éxodo de profesionales.
"Nosotros tenemos un déficit estructural de 2 mil médicos y la salida de 277 es difícil. Lo que están haciendo algunos alcaldes es contratar a los médicos de todas formas, porque estamos obligados por la Constitución a entregar el servicio. Esperamos contar con el apoyo de la seremi, pero no podemos dejar de prestar el servicio y atender a nuestra comunidad", dijo Delpin.