Córdoba está mucho más cerca de lo que parece. Y posee atractivos que son desconocidos por los chilenos. Sólo una hora 20 minutos de vuelo directo separan Santiago de esta ciudad, enclavada en el corazón de Argentina y de privilegiado clima el año entero. Además de su pasado histórico y cultural -aquí están algunas de las iglesias más antiguas de Sudamérica y en los alrededores las estancias que usaron los jesuitas en su evangelización- es una urbe lo suficientemente moderna como para entretener a cualquier viajero con ganas de diversión y bohemia. Venir a Córdoba también es barato: hay pasajes aéreos de Lan en promociones de 2x1 por 250 dólares, buenos hoteles por poco más de $ 20.000, numerosos restaurantes, libros casi a la mitad de precio que en nuestro país, entre otros.

Caminando por el centro es fácil darse cuenta del espíritu de la ciudad: en su mayoría se ve jóvenes  con mochilas o cargando libros bajo el brazo. Es de noche, las vitrinas de las tiendas están encendidas y numerosos locales tienen sus mesas en la calle, repletas de gente conversando. Parece fin de semana, pero es miércoles.

PROVINCIA ACTIVA
Córdoba tiene aires de provincia, pero es la segunda más grande ciudad argentina, con 1,3 millón de habitantes. Posee la universidad más antigua del país, pero, también, la discoteca con más onda.

La Plaza San Martín es, como en muchas ciudades, el punto cero, y la Catedral es su mayor imán. Su construcción comenzó junto a la plaza en 1577, pero sólo fue concluida 200 años más tarde, quedando en una amalgama de estilos. Hermosa y ecléctica, destaca la cúpula de 1753 y que por las noches se ilumina. Una hora en que la peatonal 9 de Julio es un hervidero. La mayoría de los locales de ropa y calzado han cerrado a las ocho, pero la gente continúa en las calles. Tomando café o charlando una cerveza, colman las mesas de los locales. A esta hora también siguen abiertas muchas librerías, casi todas bien surtidas. Un cálculo rápido nos favorece. Títulos que en Chile superan los $ 10.000, aquí no pasan de $ 7.000.

Para comer, la ciudad tiene una enorme variedad de alternativas. Desde las tradicionales pizzerías donde se prepara la masa a la piedra muy delgada,  a restaurantes de mantel largo. Desde hace un par de años San Honorato es el sitio preferido por muchos gourmet. Se trata de una antigua panadería del barrio General Paz -convertido en polo gastronómico-, que fue remodelada como restaurante.

Difícil no inclinarse por el menú degustación, que permite elegir diferentes platos de su atractiva carta por un precio fijo. Tras ordenar, los clientes bajan hasta la cava, en el subterráneo. Allí, José, el dueño, convida una copa de Malbec y deleita con jamón artesanal al chocolate.

En el barrio se han instalado varios otros restaurantes: españoles, sushis, parrillas y de cocina fusión. Destacan La Pócima, por su buena selección de vinos, y Felisa Kalea, que también tiene menú degustación. Después, nada mejor que un recorrido por La Cañada, Cerro Las Rosas o Alta Córdoba, barrios que mantienen viva la noche de lunes a lunes. El primero, es una seguidilla de pubs con música fuerte donde se juntan universitarios a beber fernet cola, trago nacional por excelencia. Cerro Las Rosas es un barrio residencial que vive un gran crecimiento y cuya Avenida Rafael Núñez se ha  poblado de restaurantes, parrillas de buen nivel y restobares. Alta Córdoba, más cerca del centro, tiene la mejor movida con una infinidad de bares y discotecas. La Osa es la de moda, pero ojo, que aquí a las 12 de la noche no pasa nada, "la gente recién llega después de la una", nos dice el administrador. Y eso que es miércoles.

DONDE DORMIR
Windsor Hotel & Tower, en pleno centro, Desde US$ 100, www.windsortower.com
HN Urbano, en La Cañada, desde US$ 84. www.nh-hotels.com
Hotel Sussex, frente a la Catedral, desde $ 22.000, www.hotelsussexcba.com.ar

COMO LLEGAR
Hay pasajes aéreos en promoción 2x1, desde US$ 249 dólares, más tasas de embarque en Lan. Válidos para viajar hasta diciembre.