En un último informe, el Observatorio Volcanológico de los Andes Sur (Ovdas) y el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), indican que la actividad volcánica del Cordón Caulle se mantiene estable, bajo un nivel de alerta Rojo, lo que se traduce en un estado de erupción menor, de baja intensidad.
Bajo esta perspectiva, se señala que el nivel de peligro que podría generar El Caulle para las personas, se reduce a la caída de cenizas finas, las cuales podrían provocar problemas en el tráfico aéreo, como ya lo han hecho tanto en Chile como en Argentina, lo que dependerá de la circulación atmosférica y de situaciones secundarias, tales como la caída de lluvia o procesos de deshielo.
Aún así, continúa la posibilidad de "eventos explosivos menores", lo que se debería a obstrucciones en el conducto a causa de la lava emitida o por cambios en la dinámica de erupción.