Corea del Norte ha llevado a cabo la revaluación de su moneda con el fin de atajar la inflación y contrarrestar el uso en el mercado negro de moneda extranjera, por primera vez en 17 años, informó hoy la agencia surcoreana Yonhap.

Según fuentes norcoreanas que comercializan en la frontera con China, citadas por Yonhap, la reforma monetaria entró en vigor este lunes y pocas horas después se iniciaron los intercambios con un nuevo valor del won norcoreano.

Debido a la gran inflación que sufre Corea del Norte desde 2002, el régimen eliminó dos ceros de la antigua divisa, por lo que la antigua moneda de 1.000 wones fue sustituida por otra de 10 unidades, medida similar a la que tomó Zimbabue para frenar artificialmente el galopante aumento de los precios.

Con anterioridad Corea del Norte llevó a cabo cuatro reformas monetarias desde que se creó el régimen comunista en 1947, la última en 1992.

A diferencia de en ocasiones anteriores, cuando se anunciaron de manera anticipada, esta vez la reforma se llevó a cabo de forma inesperada, según medios surcoreanos.

De hecho, los medios oficiales norcoreanos no han informado aún de esa reforma, mientras que las autoridades de Seúl tratan de confirmar la noticia.

De acuerdo con Yonhap, los habitantes de Pyongyang fueron sorprendidos por la alteración de valor del won norcoreano y acudieron al mercado negro para cambiar sus ahorros en dólares estadounidenses y yuanes chinos.

El dinero negro en divisa extranjera es generado por los norcoreanos que trabajan en el extranjero y que comercian con el exterior, y se especula que, con esta medida, el régimen comunista quiera que aflore ese capital oculto.

El uso de divisa foránea para la adquisición de inmuebles ha provocado en los últimos dos años que el precio de las viviendas más lujosas de Pyongyang se haya duplicado, según Yonhap.

Algunos expertos surcoreanos opinaron que esta reforma podría afectar negativamente a la imagen del Gobierno norcoreano debido a la reacción de los ciudadanos.