Corea del Norte prometió hoy sábado aumentar su "potencia nuclear" para contrarrestar las políticas hostiles de Washington, asegurando que existían indicios de que los Estados Unidos planean invadir el país amparándose en la defensa de los derechos humanos.
Hasta 116 países miembros de las Naciones Unidas pidieron el martes al Consejo de Seguridad que llevase a Corea del Norte ante la Corte Penal Internacional de La Haya por crímenes contra la humanidad, en base a lo recogido en un informe de la ONU publicado este mismo año.
"Ahora que la hostil política de los Estados Unidos apunta a una invasión de nuestra república bajo el paraguas de los derechos humanos, la idea de un desarme nuclear en la península de Corea ya no se contempla", dijo un portavoz del ministerio de asuntos exteriores norcoreano en la cadena KCNA.
"Nuestros esfuerzos por incrementar nuestra capacidad militar defensiva, incluyendo potencia nuclear, se doblarán en todos los sentidos", aseguró el portavoz en un comunicado.
Un informe publicado en febrero por una comisión de investigación de las Naciones Unidas reveló multitud de violaciones de los derechos humanos en Corea del Norte, incluyendo campos de prisioneros, tortura sistemática, hambrunas y asesinatos comparables a las atrocidades nazis.
No es muy probable que el Consejo de Seguridad lleve al país a la corte internacional para ser juzgado por genocidio y otros crímenes contra la humanidad, ya que China probablemente hará uso de su derecho a veto para impedirlo.
Corea del Norte ha llevado a cabo ya tres pruebas nucleares y se cree que tiene los materiales para fabricar una docena de armas atómicas, aunque no hay informaciones independientes que sugieran que dominan la tecnología necesaria para montar cabezas en los misiles.
El portavoz del país que dirige Kim Jong Un, que no dio su nombre, no hizo alusión a las acusaciones por parte del FBI que apuntan a que Corea del Norte estuvo detrás del ciberataque a Sony Pictures, ni a la promesa del presidente Obama de responder.
Obama dijo que el país asiático había actuado aparentemente en solitario en el ataque contra la productora. El estudio canceló el estreno de una comedia que giraba en torno al asesinato del líder de Corea del Norte, después de que algunas importantes cadenas de cines se negasen a exhibir la película ante las amenazas vertidas por los piratas informáticos.
Corea catalogó la película como un "acto de guerra", aunque un diplomático en las Naciones Unidas ha negado su participación en el ciberataque contra Sony.