Corea del Sur no ha detectado en el aire rastros de la reciente prueba nuclear de Corea del Norte, lo que aparentemente indica que el país comunista selló completamente los túneles donde tuvo lugar la detonación, según indicó hoy una autoridad surcoreana.

Después de que Corea del Norte llevó a cabo en 2006 su primer ensayo atómico, "asumimos que cambió la estructura de su túnel subterráneo e instaló elementos que impidieron la fuga de elementos radiactivos", indicó un portavoz del Ministerio de Defensa surcoreano al diario local Joongang Ilbo.

"Hemos completado el análisis de 23 muestras de ambiente tomadas en tierra, mar y aire, pero no hemos sido capaces de detectar rastros de materiales radiactivos como el xenón o el kriptón", indicó, por su parte, un funcionario del Instituto de Seguridad Nuclear surcoreano.

Corea del Sur busca sin éxito elementos radiactivos en el aire desde que Corea del Norte realizara el pasado martes en la base de Punggye-ri, al noreste del país, su tercer ensayo atómico, con una potencia de entre 6 y 7 kilotones, algo más de un tercio comparado con la bomba de Hiroshima, según estimaciones.

La fuente del Ministerio de Defensa recordó que, tras el ensayo nuclear de 2006, "una estación de vigilancia de Canadá detectó rastros de xenón", relacionados con la acción, aunque la búsqueda fue en vano en 2009, después de la segunda prueba atómica norcoreana.

Corea del Sur trata de recopilar elementos que permitan conocer la naturaleza de la prueba nuclear para verificar si ésta fue realizada con uranio altamente enriquecido en lugar de plutonio como en las dos ocasiones anteriores.

De haber sido inducida la explosión por uranio altamente enriquecido, se confirmarían los temores de Corea del Sur y EE.UU. de que el país comunista ha logrado una nueva -y quizá más peligrosa- vía para fabricar armas atómicas gracias a sus instalaciones de enriquecimiento de este material radiactivo en Yongbyon (norte).