El líder de Corea del Norte, King Jong-Un, ordenó poner en órbita otros satélites, indicó la prensa oficial norcoreana tras el controvertido lanzamiento de un cohete de largo alcance que desencadenó una oleada de indignación en el mundo y la condena de la ONU.

Kim Jong-Un, que supervisó el lanzamiento el miércoles pasado, destacó la  necesidad de "lanzar más satélites en el futuro (...) para desarrollar la ciencia, la tecnología y la economía del país", indicó este viernes la agencia  oficial  (KCNA).

Corea del Norte asegura que puso en órbita un satélite con fines de  investigación pacífica, pero muchos en la comunidad internacional piensan que  el lanzamiento fue una prueba disfrazada de misil balístico que y significó un importante paso en el desarrollo del programa norcoreano de armas nucleares.