Corte de Apelaciones abre investigación al Cuarto Juzgado de Garantía por autorizar diligencias de "simulacro"
En noviembre de 2012 Fiscalía Oriente solicitó interceptar teléfonos, por presunto secuestro de esposa del jefe de seguridad de la Embajada de Israel. Luego pidieron eliminar la causa, pues era un "simulacro".
El 28 de noviembre de 2012, el fiscal Adjunto de Flagrancia de la zona Oriente, Anatole Larrabeiti, solicitó la autorización verbal a la Magistrado del Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, Carolina Canales, para interceptar teléfonos, monitorear y registrar comunicaciones telefónicas.
Diligencias que fueron autorizadas el mismo día, en el marco de una investigación por un presunto secuestro en contra de la cónyuge del jefe de seguridad de la Embajada Israelita.
Pero el 28 de enero de este año, el Tribunal recepcionó un certificado emanado de la fiscalía oriente, solicitando la eliminación de la causa referida, aduciendo que la autorización requerida por el fiscal Larrabeiti, provenía de un procedimiento acordado en conjunto con la Embajada de Israel y el Poder Judicial, "correspondiendo a un simulacro".
Tras los antecedentes, el 29 de enero se ordenó poner fin a la causa, y según un documento enviado por el Tribunal a la Corte Suprema, la jueza Canales manifestó que en ningún momento se le informó que se trataba de un simulacro, y en consecuencia "podríamos encontrarnos frente a una orden judicial otorgada por solicitud de Fiscal fundada en antecedentes falsos".
Situación que ayer lunes, la Corte de Apelaciones de Santiago ordenó investigar y remitir todos los antecedentes al Tribunal de Alzada.
EL SUPUESTO SECUESTRO
Según la información enviada por el Fiscal Adjunto de Flagrancia de la zona Oriente, Anatole Larrabeiti, al Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, con fecha 28 de noviembre de 2012, "alrededor de las 08:30 horas aproximadamente, la víctima, cónyuge del jefe de seguridad de la Embajada Israelita, fue vista por última vez saliendo del colegio Mai Monedes en la comuna de Lo Barnechea luego de dejar a sus dos hijos en dicho establecimiento educacional. Su demora normal hasta su hogar no lleva más allá de 20 minutos siendo que hasta esta hora no se ha recepcionado comunicación alguna de parte de ella, constatándose además por parte de carabineros que no ha tenido participación en accidente de tránsito o hecho similar".
Por ello, según eldocumento de la fiscalía, "se presume un secuestro respecto de ésta dada su calidad de Agente diplomático y el cargo de alta seguridad de su cónyuge. Se ha llamado reiteradamente a su celular y si bien aparece encendido no responde llamada alguna".
En el marco de esta investigación, el persecutor solicitó permiso para interceptar el celular de la víctima, su cónyuge, el teléfono fijo del domicilio de ambos, y de la asesora del hogar, entre otras diligencias, las que luego fueron anuladas, tras asegurar que se trataba de un simulacro.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.