Distintos países ya han comenzado a reaccionar frente al clima político y civil que actualmente vive Venezuela. Uno de ellos fue el gobierno de Costa Rica, que a través de su canciller Enrique Castillo anticipó que "probablemente" brindará asilo político a los líderes venezolanos de oposición, "si lo solicitan", pero aclarando que sólo se concederá si "la petición se hace por la vía formal".

Esto se comunicó luego de que el líder opositor Leopoldo López, acusado de homicidio y terrorismo, se entregara ayer en Caracas a la Guardia Nacional (GN), luego de marchar en contra del gobierno del chavista, Nicolás Maduro.

Por su parte, la Presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, repudió los actos de violencia vividos durante los últimos días en el país bolivariano y abogó por una salida pacífica, sin embargo no mostró una posición contraria al mandato venezolano.