En 25 años, Guy Laliberté pasó de ser un artista callejero con sueños a un excéntrico millonario capaz de hacer todas sus fantasías realidad. El creador de Cirque du Soleil se defiende por estos días de una controversial publicación sobre su vida. Una biografía no autorizada escrita por el periodista Ian Halperin, Guy Laliberté: The Fabulous Story of the Creator of the Cirque du Soleil, relata sus inicios en la disciplina artística que lo haría exitoso, pero también los detalles de su vida actual, con fiestas llenas de drogas y sexo que duran varios días. La publicación ha molestado tanto a Laliberté, que exigió a la editorial Transit Publishing el retiro del libro de las tiendas canadienses, pero ellos se negaron: ante la buena venta, anuncian una segunda edición con ventas en EEUU, Gran Bretaña y Alemania.
Hoy, Laliberté es uno de los seis multimillonarios de Quebec, y está ubicado en el lugar 261 en el ranking Forbes de los más adinerados del mundo. Comenzó como un joven que viajaba por Europa ofreciendo espectáculos callejeros, pero ahora, a punto de cumplir 50, planea su viaje en un exclusivo tour por el espacio exterior.
En las páginas de su libro, Halperin destaca las fiestas realizadas en la mansión del canadiense, a las que han asistido actores, artistas, músicos y empresarios. Entre muchas anécdotas, el periodista relata que en 2001 Robert De Niro fue el mayor invitado del fundador de Cirque du Soleil. El sabía que le gustaban las mujeres negras, así que invitó a las más atractivas actrices, bailarinas exóticas y modelos. "A Guy le gusta hacer cualquier cosa para darle el gusto a sus invitados. Quiere que tengan la noche de su vida en sus fiestas", relata un amigo de Laliberté.
Para el autor, se trata más bien de un excelente plan de difusión. "El invita a algunos de las personas más influyentes y ricas del mundo y los trata como reyes", ha dicho Halperin. "Cuando Cirque sale en giras a sus respectivos países le abren todas las puertas, lo que garantiza su éxito. Es un plan de marketing brillante".