Hace algunas semanas, el ex alcalde Cristián Labbé sostuvo una informal conversación con el secretario general de la UDI, Javier Macaya, para abordar el futuro electoral del partido.
A un mes de haber permanecido detenido por tres días en el Batallón de Telecomunicaciones de Peñalolén, debido a su procesamiento por asociación ilícita en el marco de la investigación por violaciones a DD.HH. en Tejas Verdes, el ex edil habla de su regreso a la política.
¿Por qué quiere volver?
No es que quiera, creo que debo retornar a la política. Las acusaciones en mi contra han provenido del mundo político, por lo que necesariamente voy a tener que defenderme, no sólo judicialmente sino que también voy a tener que entrar a la arena política. Había dicho que renunciaba a volver a la política, pero las cosas han cambiado y lamentablemente se me acaba un eje que para mí era determinante, que era el eje académico. Entonces he resuelto defenderme no solamente en lo jurídico, sino que también en lo político.
¿Volver de qué manera?
He resuelto volver a la política, puede ser en el Parlamento o en la alcaldía.
¿Quiere postular a alcalde de Providencia en 2016?
Todavía los detalles no están definidos. Hay que verlo, pero es un escenario muy probable. Hay que conversarlo con las personas que manejan el partido. Tengo una entrevista pendiente con Ernesto Silva, presidente de la UDI. He conversado con el diputado Macaya, pero todavía tengo que afinar la línea política que voy a seguir. Puede ser una diputación en el sector. Tengo que estudiar la nueva ley electoral. Tengo varios elementos, pero indudablemente que esta misma situación que me ha tocado vivir, me ha permitido conocer el nivel de apoyo que tengo en la comunidad.
Habla del final de una proyección académica luego que la universidad Finis Terrae congelara su docencia. ¿Hay una necesidad laboral en su regreso?
¿Por qué no? Pero no estoy mirando la política como una actividad laboral. Después del procesamiento quedé absolutamente sin actividades laborales y eso indudablemente que no lo puedo permitir, no puedo quedarme sentado. Siempre digo: ser honrado es demasiado caro. Tengo lo que me dio el haber trabajado toda mi vida en el sector público, si me sumaran los sueldos podrían comprobar lo que tengo y nada más, no heredé nada y en consecuencia, vivo de lo mío, de mi trabajo, entonces tengo que necesariamente rearticularme, reinventarme, una vez más, y la reinvención en la arena política es una de ellas. Tengo una responsabilidad con mis seguidores también. En Providencia todavía tengo gente que me llama, que me invita. Tengo una adhesión bastante fuerte.
Pero usted perdió en Providencia. Incluso, dijo que gente de otras comunas se concertó en su contra. ¿Por qué cree que no volverán a organizarse sus detractores?
No, es que ahora les voy a ganar. Tendremos que convocar más persuasivamente al sector nuestro que, esa primera vez con voto voluntario, se quedó en la casa, porque consideró que el alcalde estaba asegurado. Hay 8 mil personas que no fueron a votar y esos fueron los votos que faltaron, más una decena de miles de personas que se mudó intencionalmente.
¿Ve interés de parte de la directiva UDI para apoyarlo?
No voy a anticipar nada que no haya conversado.
¿Qué pasaría si no hay cupo en la UDI? ¿Participaría por fuera?
Esa es otra situación. No debiere ocurrir, pero si tiene que ocurrir puede ocurrir, es un escenario.
En la última campaña afirmó estar hastiado de las funas ¿Cree que eso no pasará si vuelve?
No es hastiado. El odio que se ha instalado en la sociedad no me gusta, no es el país que quiero. No puede ser este matonaje político. Pero le perdí el miedo al miedo. No quisiera que me funaran y no por mí, pero si tengo que enfrentarlo, créame que en eso no me van a encontrar débil. No es soberbia, es tener la tranquilidad de que lo que uno está haciendo, está bien hecho.
¿Qué le parece la gestión de Josefa Errázuriz?
No estoy disponible para criticar ni para evaluar la gestión de la alcaldesa. Son los vecinos los que tienen que determinar qué ha pasado con Providencia.
¿Qué piensa de la polémica por el horario de cierre de botillerías?
Las decisiones que yo tomé siendo alcalde hablan por sí solas. Creo en la libertad, creo en la responsabilidad, creo en la responsabilidad de las normas. Cerrar genera una reacción que no va a frenar el consumo de alcohol, sino que la gente joven se va a mover hacia los parques, a rincones o esquinas, va aumentar el clandestinaje, van aumentar los ilícitos en el espacio público y en consecuencia el efecto final es negativo.
¿No es paradoja que la ciudadanía compare ese hecho con el toque de queda instaurado bajo el régimen que usted apoyó?
No se olvide que el gobierno militar llegó a hacerse cargo del país para reinstalar la libertad y la democracia que el marxismo y el comunismo habían querido borrar, el principio y el baluarte del gobierno militar fue la libertad. Le dimos libertad a este país.
¿No es odioso referirse así a una etapa dolorosa de la historia?
No para nada, es histórico. La historia no la podemos cambiar, el componente de la intervención militar tiene una causalidad que la han ocultado, todas las personas que generaron la violencia en este país, todos los dichos de la DC, los dichos de la Corte Suprema, la Iglesia. Todo eso estaba señalando que el país estaba en el precipicio. Los militares perseguidos, los terroristas liberados. El señor Teillier, autoconfeso de haber mandado a matar a Pinochet y a su guardia, libre y gozando de remunerados cargos que le pagamos todos los chilenos. Me parece injusto. Yo tengo una responsabilidad con mis camaradas de armas y la voy a cumplir: la reinstalación del tema de hasta cuándo persiguen a los militares.
La Corte rechazó la ampliación de los delitos en su contra propuestos por el Ministerio de Interior.
Rechazó la aspiración del ministerio de ampliar el auto de procesamiento con una serie de otros delitos, que indudablemente me demuestran claramente que estoy lidiando contra el Ministerio del Interior. La situación mía se encuadra exclusivamente en el mundo político, aquí hay una evidente persecución política, que nace del Ministerio del Interior.
¿Van a pedir la nulidad del auto de procesamiento?
No sé la palabra jurídica, pero hay que botar el auto de procesamiento, no nos queda otra.
¿Habrá nuevos careos?
Yo estoy disponible y voy a dar todas las facilidades a la justicia, no tengo problema con eso.
¿Mantiene su versión de que usted lo único que hizo en esa zona fue ser profesor de educación física?
He reiterado una y mil veces que no he cometido ningún ilícito, que no se me ha podido vincular con ningún acto ilícito. No tengo nada que responder en eso, fuera de las misiones que me dio la institución, en este caso profesor de educación física en forma transitoria, esporádica y circunstancial.