"La forma en que se ha llevado la investigación no me da las garantías para declarar: todo se filtra parcialmente y se tergiversa".

Así argumenta Cristián Warner su silencio ante la Fiscalía por la investigación sobre la supuesta rendición de boletas y facturas falsas a SQM Salar, las que habrían financiado la campaña presidencial del ex candidato del PRO, Marco Enríquez-Ominami.

Warner habló este domingo por primera vez desde que se vio envuelto en el caso, rechazando todos los delitos y confiando en su inocencia. Fue a El Mercurio donde el ex brazo derecho de ME-O reconoció que si bien "pudo haber desprolijidades", no fue "una colusión" para cometer fraude tributario como se la acusa.

"El Ministerio Público me acusó de haberme coludido con Patricio Contesse (ex gerente de SQM) para defraudar al fisco. Sin embargo, el propio Ministerio Público, a través del fiscal Gómez, declara que yo no conocía al señor Contesse. ¿Alguien me podría explicar cómo se sostiene una acusación donde, según ha dicho el mismo fiscal, los coludidos no se conocen?", explicó, subrayando que "nunca existió siquiera una conversación o correo electrónico referido al tratamiento tributario que hizo SQM de las facturas".

A pesar de lo anterior, aclaró: "Yo no he dicho que nunca me junte con Contesse, eso lo ha señalado el fiscal Gómez. Mi versión me la reservo para el juicio".

El periodista, dueño de Warner Comunicaciones, afirmó que "habría que ser tonto para ponerle a una empresa tu propio nombre para ser la fachada de una campaña", aunque reconoció que "algunos servicios" fueron contratados por su firma y "facturados a la campaña".

"Reconozco que las campañas son un caos y puede por cierto haber desprolijidades administrativas y desorden. Pero de esto a sostener que nos coludimos para cometer un fraude tributario, hay una diferencia gigantesca", señaló.

Warner quitó en la entrevista toda responsabilidad al actual abanderado presidencial del PRO. "Marco no estaba encima de los temas de financiamiento, eso lo coordinaba yo. Hubiera sido imposible que él lo hiciera, simplemente no tenía tiempo, como evidentemente es el caso también de otros candidatos como Piñera o Bachelet".

Sobre su relación actual con ME-O, relató que siguen en contacto aunque "no con la frecuencia que quisiéramos" ya que "Marco tiene una agenda de candidato presidencial que es súper intensa".

Consultado si estaba dispuesto a asumir las responsabilidades que se le acusan, comentó: "No asumo ninguna culpa. Tengo la convicción de no haber cometido delito y me defenderé de esta acusación que estimo injusta".

"Evidentemente pudimos haber sido más prolijos desde el punto de vista administrativo, pero tengo la conciencia tranquila en que jamás hicimos nada destinado a burlar la ley", concluyó.