La mandataria argentina, Cristina Fernández, pasa hoy en la finca presidencial de Olivos, a las afueras de Buenos Aires, el primero de los diez días de reposo que deberá guardar tras haber estado ingresada una semana en un sanatorio por un cuadro de sigmoiditis. 

"Uno podrá observar el estado de evolución y, en virtud de ello, el nivel de agenda de la misma presidenta de la Nación, pero obviamente la presidenta deberá cumplir efectivamente con el reposo que le han indicado los médicos que la atienden", dijo el jefe de Gabinete argentino, Jorge Capitanich, en su rueda de prensa diaria.

Sobre la actividad de la jefa de Estado este lunes y cómo se ha sentido en su regreso a Olivos de momento no ha habido ninguna información oficial. 

Capitanich se limitó a indicar que cualquier información de este tipo será transmitida mediante comunicados o a través del portavoz de la Presidencia.

Fernández recibió este domingo el alta médica tras permanecer una semana hospitalizada en el sanatorio privado Otamendi, de Buenos Aires, por un cuadro de sigmoiditis, una infección de la parte del colon denominada sigmoide.

De acuerdo al parte de la Unidad Médica Presidencial difundido este domingo, la jefa de Estado, de 61 años, deberá guardar reposo en la residencia de Olivos durante diez días y continuar "con tratamiento antibiótico, dieta especial" y "control evolutivo".