Que los veinteañeros piensen cuál será el monto de su pensión ideal no es muy común. Sin embargo, quienes lo hacen pueden descubrir las ventajas que tiene comenzar a ahorrar tempranamente. Según estimaciones de la Asociación de AFP, una persona que desde los 25 años destina cada mes $10 mil de su renta al Ahorro Voluntario Previsional (APV) terminará aportando el doble a la pensión, que si lo hace diez años después. En el primer caso, la pensión puede aumentar, en promedio, $115 mil mensuales para quienes jubilen a los 65 años. Si el ahorro empieza a los 35 años, se terminaría aportando $58 mil.

Esto, siempre y cuando se aporten $10 mil mensuales en forma ininterrumpida hasta pensionarse. Además, para este cálculo, se incluye el aporte de 15% que da el Estado por el total del ahorro que realizan las personas, que se acogen a la letra A del Régimen Tributario.

El gerente de Estudios de la Asociación de AFP, Roberto Fuentes, señala que "mientras más joven se inicie el APV, el aumento de la pensión será mayor, consiguiéndose un impacto relevante sustantivo con un reducido esfuerzo económico, debido al mayor período de ahorro y el impacto de la rentabilidad en el largo plazo".

Fuentes agrega que el Ahorro Previsional Voluntario permite realizar retiros antes de pensionarse, pero en ese caso las personas deben tener en cuenta que al sacar este dinero deberán devolver 15% de la bonificación estatal, por aquella parte retirada y también deberá tributar por las ganancias obtenidas.

CASO ESPECIAL: MUJERES

Además del factor edad al comenzar a hacer APV, la Asociación de AFP destaca que es importante tener claro que las mujeres se jubilan cinco años antes que los hombres. Esto significa que ahorran cinco años menos que ellos y, a la vez, consumen cinco años más de pensión. Esto se ve agudizado por el hecho de que las mujeres cotizan menos y viven mucho más que los hombres. Es importante considerar que, según datos de la Superintendencia de Pensiones, el ingreso imponible promedio de las mujeres que cotizan en el sistema previsional es de $ 487.488, un 15% menos que el promedio de los hombres.

Es por eso que el pilar voluntario adquiere aún mayor importancia. A junio de este año, poco más del 35% de las cuentas de Ahorro Previsional Voluntario pertenecían a afiliadas.

La estimación realizada muestra que si las mujeres posponen su jubilación cinco años, a los 65, aumentan 50% el aporte realizado producto del ahorro voluntario. Por ejemplo, si comienza a realizar APV a los 25 años y se jubila a los 60 años, aportará $76 mil adicionales a su pensión. Pero si retrasa su jubilación a los 65 años, el aporte extra será de unos $113 mil, casi 30% más.

Según la asociación, si una mujer decide jubilar a los 65 años, igual que los hombres, el alza que tendrá su pensión producto del ahorro realizado voluntariamente será semejante al incremento que registra por el mismo ahorro la pensión masculina.