La tercera versión del Cyber Monday chileno iniciado esta madrugada cuenta entre otros, con el agregado de más empresas participantes, más fiscalización por parte del Sernac y la promesa de un nuevo soporte técnico, aunque por los resultados vistos hasta esta mañana las medidas implementadas están lejos de satisfacer las expectativas de los consumidores.
Esto, porque en esta versión 2013 cerca de la mitad de las 21 empresas participantes en el Cyber Monday tuvo, o está teniendo problemas de acceso para los usuarios. Asimismo, los sistemas de pago del Banco de Chile y WebPay también están con inconvenientes, lo que obstaculiza aún más las compras.
<a href="https://twitter.com/rockandroloTM">@rockandroloTM</a> Rolando, es una falla de transbank por el número de transacciones que hay en el momento. Te pedimos que vuelvas a intertarlo
Pero lo ocurrido hoy no es nuevo. Ya conocemos la experiencia con el primer computo en la semana de las elecciones con el Servel, la declaración de impuestos en el SII, la entrega de los resultados de la PSU, el sitio de la Onemi saturado tras el terremoto de 2010 o los Foo Fighters en Lollapalooza, cuando la gran cantidad de personas que ingresó para ver el festival hizo colapsar el servidor e interrumpió la transmisión.
¿Las razones? Básicamente, un aumento de tráfico varias veces superior a lo normal, algo para lo que las empresas claramente no están preparadas. Tal como sucede en los tacos matinales, las subidas del alcantarillado con las lluvias o la saturación de las antenas celulares luego de un temblor, la cantidad de peticiones al servidor hace que éste colapse, reiniciándose repetidas veces y denegando el acceso a las páginas web. El método es conocido por los hackers de Anonymous: Se especifica un objetivo, se coordinan los usuarios y se inicia el ataque, hasta que el sitio se detiene.
Con visitas hasta 100 veces la cantidad de un día normal e ingresos que en 2012 llegaron a los 25 millones de dólares, se podría esperar que la infraestructura técnica sea suficiente como para soportar la alta demanda, pero no es así. "En todo tipo de transmisión existe un límite, y en eventos como éste es cuando queda en evidencia que las empresas no están invirtiendo lo suficiente", afirma David Iacobucci, Gerente General de Level 3 Chile.
De acuerdo al experto, existen soluciones pero cada una de ellas implica un costo mayor, lo que explicaría las salas de espera virtuales: "la idea es agregar canales para que el flujo sea conducido de forma correcta. Tal como en el ejemplo del alcantarillado en invierno, es posible desviar las conexiones a servidores en el extranjero o en la nube, aunque es muy complejo anticipar la carga máxima, a pesar de la experiencia de años anteriores", afirma.
La solución tiene que ver con las llamadas redes de entrega de contenido (CDN), una suerte de granjas de servidores que maximizan el ancho de banda y evitan la saturación o los ataques de denegación de servicio (DoS) utilizados por Anonymous. El problema es que en términos monetarios esto no se justifica para un solo día, por lo que "tendrían que existir más Cyber Monday a lo largo del año para solventar los gastos operacionales", asegura Iacobucci.
Además, hay que tener en cuenta pequeños factores como el ancho de banda del usuario, si está en un PC, tableta o Smartphone y si el sitio posee suficiente contenido "pesado" que demore su carga, como fotos, videos y animaciones en flash, por ejemplo.
Entonces, ¿en qué se parece el Cyber Monday criollo con su símil de EE.UU.? Aparentemente sólo en el nombre, ya que la conectividad y el acceso a las redes que abastecen la información son exactamente las mismas. La diferencia es el diseño y estrategia utilizadas, con 10 años de experiencia en favor de los norteamericanos.
Otro punto importante es la oferta de productos a los consumidores: "el error está en crearle expectativas a los usuatrios y no cumplirlas", afirma Marcos Brito, Gerente General de Aeropost. Según su visión, el problema es "intentar emular un gran evento extranjero, pero a la chilena, con una simple venta de bodega", donde cadenas como Amazon poseen un catálogo de 183 millones de productos y es posible encontrar ofertas no sólo de gama mediana, sino de marcas costosas como Hugo Boss o Armani.
Brito, quien por su trabajo efectúa compras en cualquier período del año, cuenta que "jamás ha visto a Amazon con problemas de acceso o caídas", y que este tipo de sitios se caracteriza por su claridad, rapidez y variedad en las ofertas, con precios bajos en productos exclusivos y entregando datos en tiempo real sobre la cantidad disponible y plazos de entrega. "Falta mucho para que en Chile tengamos algo así", agrega.