El juicio contra el exagente de policía Michael Slager, quien mató a tiros a Walter Scott, un ciudadano afroamericano de Carolina del Sur (EE.UU.) quien murió al ser disparado por la espalda en abril del año pasado, fue declarado hoy nulo.
El incidente con Scott, quien iba desarmado en aquel momento, fue grabado con un teléfono móvil, con el que se demostró que el fallecido no era una amenaza inminente para el agente, disparando de nuevo el debate sobre la brutalidad policial y el racismo en Estados Unidos.
Michael Slager, de 35 años, disparó contra Scott, de 50 años, hasta en cinco ocasiones, después de perseguir a la víctima cuando esta huía de un control de tráfico.
El jurado, compuesto por 11 personas blancas y una persona negra, no pudo llegar a una "decisión unánime" sobre el asesinato y los cargos de homicidio en un tribunal de Charleston (Carolina del Sur), lo que significa que el caso resultó en un juicio nulo, informó el juez Clifton Newman.
El presidente del jurado había empujado las deliberaciones a un cuarto día, después de tensas escenas en la corte el viernes, permitiendo a los miembros del jurado una pausa de fin de semana después de un juicio de un mes.
El juicio nulo significa que los fiscales decidirán ahora si solicitan de nuevo abrir otro procedimiento contra Slager.
Slager también ha sido acusado de cargos federales por violación de derechos civiles y podría enfrentarse a cadena perpetua, pero el fracaso para llegar a una decisión en este juicio a nivel estatal resulta un revés para las asociaciones pro derechos civiles que pedían que el agente asumiera responsabilidades.
El pasado noviembre ocurrió una situación similar en el caso contra el agente Ray Tensing, el policía blanco acusado de haber matado de un tiro en la cabeza a un ciudadano afroamericano desarmado en julio del año pasado en Ohio.