Ante los cuestionamientos por las graves incongruencias detectadas entre la primera y la segunda autopsia practicada a Hernán Canales, el abogado defensor de Marín Larraín, Rodrigo Ávila, descartó cualquier vinculación entre las presuntas irregularidades en la emisión del informe del Servicio Médico Legal y su representado.

Según explicó Ávila a La Tercera, la autopsia fue practicada a pocas horas que Larraín atropellara a Canales causándole la muerte, y su identidad como autor del accidente aun era desconocida.

"Lo relevante acá es que en la carpeta investigativa de la causa de Martín el informe del SML señala que la autopsia se hace el día 18 de septiembre, aproximadamente a las 18 horas, es decir, en un momento que ni siquiera se sabía que Martín Larraín estaba involucrado en un accidente", dijo el defensor.

Al abogado de Larraín manifestó que "acá lo que se pretende decir es que es muy raro que esto ocurra en esta causa. Yo no se si es raro o no es raro, desconozco protocolos del Médico Legal, lo cierto es que cuando se informa la autopsia, es una época en la que ni siquiera aparecía el nombre de Martín. El fue detenido el 19 de septiembre, cuando la familia de Canales estaba ya con el cuerpo en sus manos".

Rodrigo Ávila aseguró que es el perito forense del SML Mario Peña y Lillo, quien debe dar explicaciones sobre porqué la autopsia a su cargo no se condice con la practicada ayer por a perito Viviane Bustos.

En cuanto a las afirmaciones del perito de la parte querellante, Luis Ravanal, quien aseguró que la primera autopsia "nunca se practicó", el defensor de Larraín dijo que eso "sería extremadamente grave, porque el informe que está en la carpeta investigativa habla de una serie de procedimientos que dan cuenta de que sí se habría efectuado la autopsia".

"Desde el punto de vista objetivo partimos de foja cero. Al parecer la información del señor Peña y Lillo...no sería una información eventualmente  fidedigna, y eventualmente podríamos estar frente a ciertos delitos y ,desde ese punto de vista, podría demorar más los tiempos de investigación de lo que tenemos presupuestado, pero es una situación totalmente ajena a Larraín".

Según Ávila, esta situación no debiera afectar la imagen del imputado o su familia, porque "no existe ninguna posibilidad que lo que se está investigando haya tenido su origen en mi representado o en la familia Larraín".

De hecho, dijo el abogado, "Martín pensaba que el señor Canales había sobrevivido y el tenía la esperanza de que estuviera en un hospital. El se vino a enterar de la muerte de canales cuando lo detienen que es el 19 (de septiembre). Los hechos hablan por sí solos".