Vicente del Bosque rara vez deniega una propuesta, ya sea una entrevista, un acto o un homenaje. Entiende que esa predisposición forma parte de su oficio y contesta por igual a afines y críticos. También atiende a cualquiera que le pida una foto, un autógrafo o un apretón de manos. La entrevista, realizada en una cafetería próxima a su domicilio madrileño, se interrumpe cada cierto tiempo por la llegada de un admirador.

¿Qué le falta a Chile para dar el salto ganador que dio España?

Agarrar una buena racha. Los campeonatos cortos son eso, una racha. Chile tiene la base, fundamentos para ganar: jugadores comprometidos, patriotas; que llevan jugando tiempo juntos, una idea muy clara ofensiva y defensiva. Equipo y también individualidades.

¿Es cosa de fútbol o de cabeza?

En el fútbol están desapareciendo los complejos, eso de enfrentarte a alguien con la convicción de que es muy superior a ti. Y Chile ya no los tiene. La prueba es que nos hemos enfrentado mucho y nos las han hecho pasar canutas. Contra Chile, España ha tenido una historia para contarla, de sufrimiento. Quiere decir que tiene juego, sistema, concepto de lo que quiere hacer, y tiene jugadores. Todo.

¿A qué se refiere con una historiapara contar?

Nos han sido muy incómodos siempre, pero que muy incómodos. Y luego, está la anécdota del día que se pararon, en el Mundial, y que no quisieron jugar más porque la derrota por la mínima les interesaba. La primera vez en mi vida que me enfrento a un rival que de repente se para y no quiere atacar más. Ni que le ataquemos. De una presión suicida en campo contrario -y digo suicida, porque si no sale bien, te suicidas-, que llevaban adelante como buenos militares, muy incómodos, y, de golpe y porrazo, desde el banquillo vemos que están diciendo que no haya guerra. Pues una sorpresa, claro.

¿Ha notado en la selección el viaje de Bielsa a Sampaoli?

Yo creo que no se nota. No soy yo quién para catalogar a nadie, pero Sampaoli me parece de la escuela de Bielsa.

¿Es lo de Bielsa con más pausas?

Posiblemente. Pero con muchos puntos en común. Jugar al ritmo de presión que ponen es imposible aplicarlo igual durante 90 minutos.

¿Y en torneos cortos?

También. Son siete partidos, pero los jugadores traen carga detrás. Todos llegan de fases de competición intensas. Nosotros igualmente queremos robar la pelota inmediatamente después de la pérdida, pero no es fácil. Muchas veces no se puede. Esos ratos de pausa de ahora le vendrán bien a Chile para aumentar la efectividad en sus intentos de robar la pelota.

¿La falta de altura chilena en defensa es una ventaja para España o como ustedes juegan por abajo no tanto?

Sí, no son muy altos. Pero nosotros tampoco. Nuestros laterales son bajos, los centrocampistas son bajos, cuando jugamos sin nueve somos bajos arriba… No creo que no tener altura  sea mucho problema para Chile contra nosotros. Trataremos de sacar provecho a balón parado, pero tampoco somos un equipo muy brillante en eso.

¿Una tentación para poner a Fernando Llorente o no conviene cambiar de modelo por las características del rival?

No creo que nos preocupen mucho los rivales. Nosotros tenemos nuestra forma de juego, aunque claro que hay una parte, mayor o menor, que tenemos que atender. O sea, hay que advertir a los jugadores de que Chile nos vendrá a buscar a nuestro campo, no nos dejará jugar con comodidad ni elaborar. Eso lo tenemos que saber, pero no creo que nos influya en la toma de decisiones o en la alineación.

¿Hay conexión entre el partido de Sudáfrica y el de Brasil?

No creo, aunque tanto ellos como nosotros somos prácticamente lo mismo. Así como Holanda ha hecho un cambio importante de jugadores, sobre todo en defensa, Chile y nosotros no tanto. Más allá de que vaya Matías o Valdivia, conservan lo esencial. La mayoría estaba. Igual que nosotros. Incluso nosotros hemos cambiado más.

¿Y con el amistoso de la pelea final (en Suiza) hay conexión?

Es que son gente que le va la marcha, que no se entrega fácilmente. Incordian. Por cuarta vez tuvieron buena situación para ganarnos y no lo consiguieron. Seguro que les estimula jugar contra España. Pensarán: "Nosotros no somos inferiores, nos han ganado por muy poco".

Y luego están los piques que proceden de la Liga española: Diego Costa o Cesc con Medel.

No. A estos niveles, con independencia de que se produzcan esas pugnas, esa rivalidad, hay fair play. Obligado, además.

Su bandera... ¿Le preocupa que se pierda?

Es que estamos obligados. Y hacerlo de forma natural, nada impuesto. Presumo de unos jugadores majos. Podemos fallar en tirar a puerta y darla mal, pero en comportamiento, no. Más allá de que nos puedan echar en cara algún episodio, que son la excepción, no debe ocurrir. Lo sabemos.

Pero los santos ya son minoría. Alba, Busquets, Arbeloa, Xabi, Costa son más bien pendencieros.

En fútbol nadie está exento de no cometer un error, pero yo creo que sigue imponiéndose la corrección. Mire Zidane, también dio un cabezazo y no puedes calificar su carrera de golfo.

Ya, pero en las fotos de los líos siempre salen los mismos. A Iniesta nunca le cazan en ésas.

A mí no me gusta un equipo que esté todo el día protestando. Puedes sacar algo de ventaja, pero al final lo que haces es distraerte. Yo tenía un entrenador que me decía: "Vicente, cuando protestas mucho es porque no estás jugando bien". Y te rebelas ante todo. Lo mejor es centrarte en el juego. No digo que no hables con el árbitro una jugada puntual, pero esas protestas colectivas no las soporto, no conducen a nada. Es un síntoma de que no se está en buen momento.

En el último partido contra Chile, los balones cruzados en largo hicieron retorcerse a España.

Sí, ellos utilizan mucho a los dos de las bandas. Especialmente a Isla. Entran por dentro con diagonales, bien sea Vargas o Alexis, y crean mucho espacio por fuera. Lo hacen muy bien, cambios de orientación en largo, con precisión, y te buscan las vueltas. Pero bueno, estamos avisados.

Chile tiene en común con España el falso nueve. O no lo encuentra o se ha dejado llevar por la moda.

Tener, tiene. Alexis en el Barça, como recurso, ha jugado a veces ahí. Y va bien de cabeza, como Vargas. Y luego tiene a Suazo, que sí es referencia.

Pero no va.

O sí, veremos…

¿Holanda le va mejor a España que Chile?

Pues no lo sé. Holanda individualmente es muy fuerte. Tiene a Van Persie, a Robben, gente que muy pocos tienen. Y una escuela. Muy difícil.

¿Y de Australia qué decimos? Pues muy poco. Tenemos poca información. Los conocemos porque tenemos a gente analizando, los tenemos controlados. Hay que tenerles respeto. El otro día se pusieron 0-3 contra Ecuador y son gente que está jugando por Europa. El mismo portero de 41 años del Chelsea (Mark Schwarzer), que tuvo que jugar contra el Atlético, es australiano y lo hizo bien. Ya no hay peritas en dulce.

¿Qué selecciones ve para el Mundial con fuerza?

Hay un abanico muy amplio. No pondría yo tres o cuatro selecciones. Chile, Colombia, Ecuador o cualquiera de éstas, a poco que se lo crean, pueden dar un disgusto. Y ya no te digo las europeas. No nos quedemos en Alemania o España.

En Sudáfrica dijo que todo lo que no fuera ganar el Mundial iba a saber a poco. ¿Lo mantiene esta vez?

No nos lo imponemos. Pero fuera lo percibimos igual. Y no se da cuenta nadie de que... Bueno, sí se da cuenta. Dicen que sí, que hay que ganar el Mundial, para darnos la mayor leche del mundo si no lo conseguimos. Y nosotros estamos preparados para intentar ganar, pero sabemos que es muy difícil. Además, ir de favorito es un síntoma de antideportividad. De mí nunca van a salir esas palabras: "Tenemos que ganar el Mundial". Yo no soy como esos boxeadores que antes de los combates dicen que en el segundo asalto tumbarán al rival. Hay que ser prudentes e intentar ganar si se puede.

¿Están preparados para perder?

¿Cómo no? Para eso no se prepara nadie. Si llega la derrota, habrá que saber estar. Me sabría mal que nosotros no supiéramos estar. Si perdemos, pues... Para lo bueno y para lo malo tenemos que dar ejemplo de vida.

¿España va a ser competitiva en Brasil, pese a los síntomas?

Seguro que  sí. Si luego no nos salen bien las cosas, saldrá alguno diciendo: "Ya lo dije yo, era necesario un cambio". Y si sale bien, nadie valorará nada. Vamos a hacer lo que creemos sin tener miedo al qué dirán. Si apareciera un chaval joven que nos fuera a aportar vitalidad, lo traeríamos; pero traer por traer, no. No me va a impresionar nadie por dos partidos buenos ahora. Toda la vida se está hablando del futuro, el futuro, el futuro. Pero también está el presente. Es que el futuro lo hemos ido haciendo. Si quitas a Xavi, a Iker, Iniesta o Ramos, el resto no pasa de los 25 años.

O sea que descartamos sorpresas de última hora en la lista.

No creo. Tenemos hasta 40  jugadores que potencialmente pueden venir. Y quitar a cualquiera me va a producir dolor. Y habrá jugadores que no estarán que han sido campeones, pero no puedo llamar uno a uno para anunciárselo. Lo hice con Marcos Senna en Sudáfrica; le dije a Hierro que lo llamara. Pero por qué a él sí y a otros no. Y no quiero ser falso. No ir es una putada. No hace falta ni que se lo diga por escrito ni mirándole a los ojos: "Oye, que no vas a ir". Y cómo se lo explico. Lo lamentaré, pero no puedo estar todo el día dando explicaciones de fulano por qué no viene. No vendrá porque creo que hay otros mejores, sin malicia y sin manía a nadie. Me da igual. Voy a traer a los que crea. No tengo ninguna atadura con nadie. Oye, ¿nos equivocaremos? Pues seguro, es imposible acertar.

¿Diego Costa es un recurso o el anuncio de que España quizás va a jugar a otra cosa?

España no va a jugar a otra cosa. Ni con él ni con otro. No va a variar nuestro juego porque estén Costa, Llorente, Torres o Villa. No creo. Son ellos los que se tienen que adaptar a nuestro juego. Hombre, es impepinable (seguro) que si jugamos con Cesc, por su estilo, ahí va a tener más contacto con el balón y con sus compañeros. Pero yo es que de Diego Costa no quiero que atraiga las defensas, sino que las estire, que estire al equipo. Que juegue casi-casi en contra del balón. Es lo que vamos a buscar con él. Pero eso es complementario, no es nocivo. Juega con más espacios, nos interesa que no venga cerca del que tiene el balón. Aunque tampoco hay que ser absolutos, que no venga nunca, eso no. Habrá veces que Xavi e Iniesta necesiten que venga para tirar una pared. Pero debe jugar en contra del balón.

Lo que no puede ser es el debut, se le vio cortado, casi pidiendo perdón por jugar con España.

Posiblemente. Hay que invitarle a que sea Diego Costa. Que juegue como juega en su equipo, no queremos algo distinto. Y que no se impresione. Este es un grupo muy generoso con el recién llegado. Se adaptará enseguida.

¿La temporada gris de Busquets ha modificado su sobrevalorada opinión de él?

No lo voy a concretar en Busquets. Pero es que el Barça ha jugado muy bien parte de la temporada, y no hace tanto. No podemos quedarnos con los últimos días. tenemos que tener una perspectiva más amplia. Y Busquets ha hecho una muy buena temporada, aun teniendo unos problemas físicos que sabemos que le están incomodando. También Xabi Alonso tuvo una explosión y ahora parece que se ha caído un poco. Y si Xavi ha jugado con su equipo todo el año, quiénes somos nosotros para decir no, no viene. Otra cosa es que venga como titular o ya veremos. Pero no podemos marginar a nadie de golpe por unos pocos partidos.

Habla de Xavi, el jefe del estilo. Y está en decadencia. Un problema gordo.

Sí, sí, lo que quiera. Pero es que está jugando. Y además yo valoro mucho al jugador entregado. Un jugador no puede estar pensando  todo el día en lo que ha ganado. En ese sentido, no tengo dudas de Xavi.

¿Coincide con él en que su heredero en la selección será Koke?

No creo. ¿Heredero de Xavi? No sé, más Thiago. O Koke, los dos han jugado en sub 21, tienen empaque, saben jugar al fútbol, pero son trabajadores, son dinámicos, tienen capacidad individual. Es que yo creo que otro Xavi, no. No podemos estar mirando para atrás, sacar otro Xavi. Aparte de que no habrá otro.

¿Gabi no le hace recapacitar sobre su intocable pareja del doble pivote?

No son intocables, ninguno. Son chavales, incluidos Gabi o Bruno, con capacidad para defender, para construir y para tenerla. Son gente impagable. Que piensan en el equipo más que en ellos. Hemos jugado en la fase de clasificación con un medio centro solo, pero creemos que por las características de nuestra selección lo mejor es seguir así, con dos. Sobre todo en estos campeonatos que son  cortos,  que no andemos con tonterías y que sigamos con solidez.

Usted minimiza los efectos  del bajón del Barça, pero es que la selección española es su prolongación.

Lo mínimo que se ha ganado un equipo y una plantilla como esa es un mínimo respeto. Y más desde mi posición. Ellos sabrán. Y tampoco ha sido del todo España la prolongación del Barça, pero bueno. Todas las selecciones se basan en un equipo. Pero es lo que había. Del Madrid no podemos llevar a Cristiano, Benzema, Modric, Bale o Di María.

¿Cómo va a lograr que Casillas esté a la altura, pese a la inactividad?

Ha sido una situación un poco insólita, pero la ha manejado bien. Cuando ha salido, ha rendido bien. Es coherente, majo, y ha sabido llevar con normalidad una situación complicada.

¿Xavi manda en la selección?

Pero vamos a ver, cómo no voy a dialogar con Iker o con Koke si viene cuál es el que considera su puesto ideal.

¿Y le dijo que era lateral?

No, hombre, no. Digo que el hecho de que yo pregunte a un jugador cuál es su puesto ideal no es que me pliegue a nada. Yo quiero tener el conocimiento de ellos; cuanto más, mejor. Yo no soy de hablar mucho, pero cómo no voy a hablar con Xavi o con Xabi Alonso. Si son mis apoyos. Lo que yo quiero es que todos se sientan conformes de cómo juguemos. Algunas veces pueden tener reticencias sobre algo. Lo que no puedo es pedir decisiones, que las vamos a tomar nosotros; lo que pido son opiniones. Compartir conocimientos no es síntoma de debilidad. No se puede ser entrenador subido a una tarima creyendo que lo sabes todo.

¿En lo personal cómo se toma usted el Mundial?

Con sentido de la responsabilidad, nada más. Conozco bien el ambiente en el que me muevo. Sé las reacciones, cómo es el fútbol de variable y todos tenemos la visión perfecta de lo que debiera ser antes de que se produzca, y mucho más claro cuando ya se produce. Son opiniones de fútbol, que yo valoro, pero al final es uno el que tiene que tomar las decisiones y es el que se equivoca.

La bipolaridad radical del fútbol español ha afectado a Del Bosque. Adeptos y detractores radicales.

Yo no hago las cosas para convencer a los que ya se han posicionado. Esos son inconvencibles. A los que se han instalado en una acera no les voy a convencer de nada, y a los que me aprecian o me valoran, o ven las cosas con más dulzura, pues tampoco. Si ganamos, unos dirán: "Sí, pero ya verás cómo pierde el siguiente". Pero me duele en algunos casos, eso sí le digo, no voy a ser falso. Pero no puedo estar intentando defenderme permanentemente.

Pero si son más radicales los delbosquistas. Hay una legión que no permite ni toserle a usted.

Pues mal hecho, también. ¿Cómo no se me va a poder discutir? Me rebelo contra eso, también. Pero no puedo hacer nada. Tengo que asumir lo que me toca. Tampoco quiero que me defiendan así.

¿Los que más le duelen son los que proceden del madridismo?

Sí, desprecios. Nadie puede entrar en lo que yo siento por un club que me ha dado todo. Eso que dicen algunos, cómo va a traer a Jesé, si tiene manía al Real Madrid. Pero si hace dos meses llevé a Nacho, que no lo conocía nadie…

Sí, fue escandaloso, por cierto.

No. Yo conozco a ese jugador, creo en él, y por eso lo llevé. Sin fijarme en donde nació ni su historia. Pero nadie se acuerda. Ahora resulta que tengo manía al Madrid.

La verdad es que es el colmo. ¿Qué más quieren los madridistas?

Podré haber tenido un mal comportamiento con el presidente (Florentino Pérez), que me equivocara por no ir por una medalla, pero discutir mi madridismo… La gente dice que soy muy político, pues mire, en ese caso, no demostré habilidad política ni diplomacia. Me llegó la citación para ser condecorado por el presidente y no me sentí cómodo. ¿Por qué voy a ir si no me siento cómodo? Y fíjate si he hecho cosas durante estos cuatro años, que he ido a sitios impensables..., porque creo que el fútbol está por encima de los intereses particulares. Hay gente que desacredita el fútbol y nosotros estamos para mejorarlo.