La Policía Federal incluyó el nombre del ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva en una investigación que depura el pago de sobornos por parte de fabricantes de automóviles a cambio de la aprobación de leyes favorables a su actividad, según informó ayer TV Globo.
La Policía añadió en su acusación, además de a Lula, a otra docena de personas, entre ellas los ex ministros Gilberto Carvalho y Erenice Guerra y a varios empresarios, entre ellos Paulo Ferraz, ex presidente de Mitsubishi en Brasil, de acuerdo con el texto al que tuvo acceso TV Globo.
La investigación se refiere a la medida legislativa que extendió los descuentos tributarios a las montadoras y fabricantes de vehículos instalados en el norte, noreste y centro-oeste del país, los cuales se extinguían en marzo de 2010 y fueron prorrogados hasta el 31 de diciembre de 2015.
De acuerdo con la Policía, esa medida se empezó a negociar en 2009, cuando Lula era presidente, y según pruebas recogidas por los agentes su aprobación implicó, según filtra TV Globo, el pago de seis millones de reales (cerca de dos millones de dólares), cuyo destino era el Partido de los Trabajadores (PT), entonces en el poder.
La Policía basa su denuncia en nuevas pruebas recogidas a partir de algunos de los lobistas investigados como reuniones, intercambio de correos electrónicos y encuentros entre Lula y el Mauro Marcondes, ex vicepresidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores (Anfavea).
"Cabe destacar que el destino de los 6 millones de reales, que según el documento sería 'Seis Mi (para a campanha)', o sea, el valor sería para abastecer campaña del partido probablemente por caja 'B', como fue observado a lo largo de las investigaciones de la operación Lava Jato", dice el texto de la Policía, citado por TV Globo.
Según la denuncia, facilitada por TV Globo, "hay indicios suficientes de materialidad y autoría de delitos de corrupción activa por las negociaciones y ofrecimiento de ventajas indebidas".