La organización Electronic Frontier Foundation (EFF) denunció que el gobierno sirio implementó un sitio falso de YouTube que busca rastear a los "ciberactivistas" que están en contra del régimen de Bashar al Assad.

Según informó ElMundo.es, la página simulaba un perfil del popular portal de videos enfocado a los opositores sirios, pero en realidad atacaba a los usuarios de dos maneras: la web trató de robar las contraseñas de los usuarios que querían hacer comentarios sobre un vídeo, y también pedía a los usuarios de que instalaran un código malicioso disfrazado como una actualización de Adobe Flash Player, según EFF.

Cuando el usuario acepta esta "actualización", el equipo descarga el software. Acto seguido, se conecta a un servidor situado en Siria y se instalan otros programas que contienen 'malware' o codigo malicioso, y se instalan en el equipo. El controlador tiene acceso completo al computador del usuario.

De esta manera, el régimen sirio intenta localizar a los disidentes que se encuentran en la red, que cuando se inició la revuelta hace ya un año, han utilizado constantamente las plataformas de video y redes sociales para informar y denunciar la situación.