Denzel Washington está hoy en Madrid presentando su última película, Asalto al tren Pelham 123, en la que vuelve a trabajar a las órdenes de Tony Scott, y que protagoniza junto a John Travolta.
El actor, que ha ganado dos premios Oscar, habló de su intensa carrera en Hollywood, donde no se considera un privilegiado; de los actores que admira y de sus planes como director.
"Sí me siento un privilegiado por estar vivo. Es un regalo y no es garantía de nada", afirmó Washington, que en el remake de la cinta que en 1974 protagonizara Walter Matthau, da vida a un controlador del metro de Nueva York, cuyo día se convierte en un caos cuando un grupo de delincuentes decide secuestrar un vagón de tren y pedir un rescate de 10 millones de dólares.
El actor, que ya trabajó con Scott en Déja Vu, El fuego de la venganza y Marea roja, reconoció que le une una relación "muy positiva" con el director: "Disfruto trabajando con él y nos entendemos muy bien".
No obstante, Washington disfruta más dirigiendo que actuando. "El director es como un pintor y la película es su cuadro y decide qué color poner. Un actor sólo decide sobre su personaje", consideró el actor de Día de entrenamiento.
"Sería genial conseguir un tercer Oscar en mi faceta de director", dijo entre risas el actor, que espera poder dirigir su tercera película en 2010. "A mi agente no le gusta que dirija porque no gano lo mismo", bromeó el también productor, del que se dice cobró un caché de 20 millones de dólares por su trabajo en Gánster americano.
La crisis, "que se nota en EEUU", no es un problema para la industria del cine en este país, según detalló. "Mi madre, que era peluquera, decía que el negocio iba bien en tiempos difíciles porque la gente encuentra una escapatoria sintiéndose guapa. Lo mismo ocurre con la industria del cine, que ha aumentado en EEUU un 17 por ciento. En los momentos difíciles, la gente necesita un escape", consideró.
Un escape y una ilusión como la que dijo han encontrado los estadounidenses con la llegada de Obama a la Presidencia. "Su llegada ha sido un acontecimiento increíble y una buena oportunidad para el país. El hecho de ser un presidente que tiene mucho que ver con las nuevas generaciones, además del tema racial o la forma que ha tenido para financiar la campaña... No han podido con él", matizó, agregando que Obama "ha abierto la puerta al diálogo global y está intentando ser muy transparente, como prometió".
Preguntado por sus mejores películas, dijo que prefiere mirar adelante. "No miro mis películas antiguas", señaló, si bien detalló que Grito de libertad le dio la oportunidad de viajar fuera de EEUU y que fue "fantástico" hacer Malcom X.
En cuanto a los actores que más le han aportado en su carrera, Washington señaló a Gene Hackman, Angelina Jolie, Morgan Freeman y John Travolta, "un gran actor y un gran ser humano". De su amigo Will Smith adelantó que ha escrito un guión de comedia "muy divertido" en el que podrían trabajar juntos.