Desde tempranas horas de esta mañana personal de la Armada, el Sernapesca y el SAG intentan controlar un derrame de petróleo que afectó al buque de bandera croata "Achilleus", que fue abastecido por la nave "Doña Carmela" -por la cual Terpel suministra combustible a compañías navieras- en el sitio número 8 del puerto Panul, en la comuna de San Antonio, Región de Valparaíso.

En total, habrían sido vertidos al mar unos 500 litros del hidrocarburo que, al parecer, comenzó a derramarse producto de una burbuja o una falla humana, lo cual generó una mancha de contaminación amplia y visible desde distintos puntos de la costa. 

Según la versión de Terpel. "la operación finalizó sin inconveniente alguno a las 2.00 AM de hoy. Más tarde, después de 25 minutos de terminada la entrega, personal de la nave 'Achilleus' avisó sobre derrame de producto por el lado contrario por donde se había realizado la operación".

De acuerdo a lo informado por el gobernador de San Antonio, Mauricio Araneda, la zona contaminada podría abarcar unos 100 metros de largo por unos 500 de ancho, lo cual podría duplicarse pese a los esfuerzos realizados por efectivos de la marina, quienes con botes zodiak y mangas especiales intentaron desde las 3.00 de la madrugada contener el derrame.

"A las 3.00 horas, mangas de emergencia de la Armada permitieron la primera contención de la mancha que la corriente lanzó hacia adentro y no a altamar. Esta mancha ha ido aumentando. Tiene 100 metros de largo por 500 de ancho, lo que podría aumentar al doble. En este momento hay una empresa especializada que tiene que hacer la limpieza con filtros y mangas en la zona", afirmó la autoridad.

Araneda indicó, además, que hasta el lugar también ha concurrido el SAG, Sernapesca y la autoridad sanitaria para iniciar sumarios y determinar las responsabilidades de este derrame.

Como medida de precaución, asimismo, la gobernación de San Antonio solicitó el cierre de la caleta de pescadores Pacheco Altamirano, por lo que los trabajadores del mar tendrán que extraer sus recursos una milla más adentro, a fin de evitar la llegada de pescado contaminado al comercio.

La limpieza total del sector podría tardar, al menos, cinco días, periodo en que también se analizaran muestras de rocas y de la flora y fauna del sector con la finalidad de medir el impacto ambiental provocado por este vertimiento de combustible.