La desaceleración en China es vista como la mayor amenaza para el crecimiento económico, según un informe sobre la situación en la región Asia Pacífico, divulgado este miércoles en Vladivostok, en vísperas de la cumbre de las 21 economías del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC).
Con la "incierta" recuperación económica en Estados Unidos y la "incapacidad" de la Eurozona para "encontrar una solución a sus problemas", se esperaba que los mercados emergentes proporcionarían el impulso que necesita el crecimiento mundial.
Sin embargo, los líderes de opinión regionales "están más preocupados sobre el impacto de una desaceleración en China" que por la crisis de la deuda en Europa o en las dificultades de la economía en Estados Unidos, señala este Estado de la Región, elaborado con la opinión de 500 líderes regionales del mundo académico, empresarial o funcionarios por el "think tank" Consejo de Cooperación Económica del Pacífico (CCEP).
Según las últimas estadísticas del banco británico HSBC, el índice de actividad industrial china (PMI) cayó en agosto a su nivel más bajo en más de tres años: a 47,6 frente al 49,3 en julio. Se trata de la décima caída consecutiva y el nivel más bajo desde marzo de 2009.
Por encima de 50, este índice muestra expansión y por debajo, contracción.
La segunda economía mundial creció en el trimestre abril-junio un 7,6%, el peor resultado en tres años y el sexto trimestre consecutivo de caída.
No obstante, el secretario general del CCEP, Eduardo Pedrosa, recordó en la presentación del mismo que China crecerá este año alrededor del 8% y el 8,5% en 2013.
El insaciable apetito de China por materias primas ha mantenido a los otros países de la región con dinamismo, pese a la caída de las exportaciones a Estados Unidos y Europa.
Para minimizar el impacto de esta desaceleración de la segunda economía mundial y primer motor económico de la región, los autores del informe piden avances en los acuerdos comerciales regionales, en particular el Acuerdo de Libre Comercio de Asia-Pacífico, una versión ampliada del Transpacífico (TPP), que actualmente negocian 11 países, entre ellos Chile, México y Perú, los tres latinoamericanos de este club.
La conclusión del TPP supondría una contribución de 295.000 millones de dólares al PIB mundial, pero en el caso de que el acuerdo fuera suscrito por todos los países de la APEC, incluida China, la inyección a la economía mundial sería de 1,9 billones de dólares.
No obstante, por el momento son pocos los que esperan una conclusión rápida de alguno de ellos.