A casi dos años del homicidio, el Ministerio Público tiene descartado que el asesinato de René Palma Mancilla (26), ocurrido el 29 de marzo de 2008 en la Villa Francia, haya sido producto del disparo de un encapuchado durante los incidentes del llamado Día del Joven Combatiente, tal como han declarado en la investigación tres amigos de la víctima.
Así lo señaló ayer el fiscal Patricio Millán, a cargo del caso, y quien solicitó una audiencia para formalizar a Gonzalo Apablaza, Sebastián Apablaza y Enzo Segura, amigos y testigos de la muerte de Palma, por el delito de obstrucción a la justicia, debido a que han entregado una serie de datos falsos en la indagatoria.
Los jóvenes declararon en la investigación que la noche del 29 de marzo de 2008, cerca de las 21.30 horas, un grupo de encapuchados los encaró. A unos 18 metros de distancia uno de ellos sacó un arma y disparó en contra de Palma, quien falleció dos horas más tarde.
El fiscal Millán sostuvo ayer que la versión sería falsa, toda vez que un peritaje elaborado por la PDI estableció que el disparo en contra de la víctima se realizó a menos de dos metros de distancia. El análisis consideró la trayectoria del proyectil y un análisis químico a las ropas de la víctima.
"La tesis de los encapuchados la estamos descartando, de acuerdo a los antecedentes no sería válida. Ellos (los amigos de Palma) tienen que decir lo que sucedió en la Villa Francia y esperamos poder aclararlo lo antes posible", sostuvo el fiscal.
Otro antecedente relevante es que la bala .38 y que provocó la muerte al joven fue hallada en una plaza distante 550 metros del lugar donde los jóvenes declararon que se produjo el ataque, en la esquina de las calles Los Bosques con Guillermo Saavedra, comuna de Estación Central.
NUEVA INDAGATORIA
Según el investigador, una de las hipótesis es que haya sido una muerte accidental. "Es probable que esa noche hayan estado manipulando un arma y a alguien se le disparó. Eso lo tienen que decir ellos", señaló el fiscal.
Respecto de si pudo tratarse de un crimen intencional y planificado, dijo que "nada está descartado", precisando que aún no hay elementos en esa dirección. "Puede ser (una muerte) accidental o culposa", aclaró.
Según fuentes del caso, los tres jóvenes también han entregado versiones contradictorias respecto a lo que hicieron antes y después de la muerte del Palma Mancilla, quien era inspector del Transantiago. Incluso, uno de ellos dijo que estuvo reunido con varias personas, pero entregó nombres que resultaron ser falsos. Las identidades fueron chequeadas por la policía.
Alfredo Morgado, abogado de la familia de la víctima, señaló ayer que "estimamos que esta compleja y difícil investigación se ha visto enturbiada dificultándose llegar a la verdad por los referidos testimonios erráticos".
Ayer, los tres jóvenes debían presentarse a la formalización de cargos por obstrucción a la justicia, pero no fueron notificados, por lo que la audiencia fue aplazada hasta el 28 de mayo.