Para evitar contagiarse con algún virus informático, la recomendación más eficiente es evitar descargar archivos o programas de dudosa procedencia. Pero ¿qué hacer cuando el malware ya viene por defecto en nuestro nuevo celular?
Este nuevo tipo de ataques es el que descubrió la firma de seguridad Check Point, la cual presentó un informe en el que revela que al menos 36 celulares y tabletas Android sufrieron un hackeo con el cual se incorporó software malicioso en su configuración de fábrica, es decir, este estaba presente en el equipo sin necesidad de bajar un archivo desde internet.
El análisis de Check Point señala que este software no estaba incluído en el ROM -la base que le da vida a cualquier celular- creado por las compañías, sino que este fue incluido durante alguna fase de la línea de ensamblaje del producto por alguien con acceso a su fabricación.
La mayoría del malware detectado tenía relación con programas creados para mostrar publicidad no solicitada, para robar información e incluso programas de "Ransomware", usados para tomar equipos como rehenes, los cuales son capaces de encriptar información, la que solo se recupera pagando una recompensa.
Dentro de la lista de equipos afectados, la cual se puede encontrar de manera completa en este link, se encuentran modelos de Samsung como el Galaxy S7 y el S4, además de tabletas como la Note 8.0. También se encontró equipos infectados de las marcas LG, Lenovo, Oppo, Asus y Xiaomi, pero cabe señalar que no todos los modelos vendidos alrededor del mundo vienen con esta falla, sino que se trata de partidas parceladas creadas para uso corporativo, por lo que no se descarta que hayan sido incluidos para realizar espionaje.
¿Y cómo se soluciona? La respuesta es sencilla, pero dramática: es necesario realizar un "flasheo" del equipo, es decir, respaldar todos los datos, enviarlo a la empresa fabricante y que esta reinstale desde cero el sistema operativo, por una versión limpia.