Un donante anónimo regaló al museo del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau cinco piezas originales de placas metálicas con agujas que usaron los nazis para tatuar a sus prisioneros, anunció el jueves el portavoz del museo, Bartosz Bartyzel.
"Obtuvimos las placas hace unas semanas y confirmamos su autenticidad", declaró a la AFP Bartyzel.
En cada placa hay un número formado por agujas, un cero, dos tres y dos seis o nueve, que servían para identificar a los prisioneros, precisó.
Primero, se tatuó a los detenidos en el pecho, luego en el antebrazo izquierdo. El campo de Auschwitz fue el único que usó este tipo de identificación, indicó Bartyzel.
Estas placas serán conservadas en los archivos del museo, antes de ser presentadas al público durante una exposición prevista en los próximos años, dijo el vocero.
Se trata de objetos extremadamente raros. Hasta ahora, el Museo militar de San Petersburgo, en Rusia, tenía un único ejemplar, según el museo de Auschwitz.
De 1940 a 1945, un millón de judíos europeos murieron en Auschwitz-Birkenau, así como 70.000 a 75.000 polacos no judíos, 21.000 gitanos, 15.000 prisioneros de guerra soviéticos y 10.000 a 15.000 prisioneros más, según datos del museo.