Si el capítulo de Los 80 que Canal 13 transmitió el domingo recién pasado terminó del modo más tenso imaginable -con Claudia Herrera (Loreto Aravena) subiendo a un taxi conducido por Pedro, el agente CNI que se hace pasar por hermano de su padre (Pedro, personaje interpretado por Otilio Castro)-,  el episodio con que finalizó el ciclo no dejó que el espectador respire tranquilo ni un minuto.

De todos modos, fue esta misma expectación la que llevó a que el final de temporada promediara 35 puntos de rating online, con un "peak" de 40 puntos, el más alto desde que se transmite la serie.

Este último capítulo se vio marcado por los intentos de Juan Herrera (Daniel Muñoz) por proteger a su hija Claudia a través de la Vicaría de la solidaridad, pues finalmente decide poner un recurso de amparo para ayudarla legalmente en caso de una posible encarcelación.

Claudia nota que la ruta que ha tomado el "taxista" no la lleva al terminal de buses, pero cuando finalmente comprende lo que está pasando ya es demasiado tarde: Pedro le apunta un arma a la cara y le dice que se baje del auto sin escándalos.

Félix (Lucas Escobar) comienza a darse cuenta que su hermana mayor podría estar en problemas cuando ve a su madre Ana (Tamara Acosta) llorar desconsolada.

Más tarde, Juan se cruza en el camino de Claudia de un modo terrible. Mientras él busca preocupado a su "hermano", llega a la pensión donde Claudia ha sido dejada amarrada y amordazada por Pedro, pero no logra pedir ayuda a pesar de su desesperación por tener tan cerca a su padre.

Casi sin quererlo, Martín (Tomás Verdejo) se ve involucrado en otro hecho de violencia: cuando a punta de balazos son apresados un grupo de jóvenes que pedía asilo político en la Embajada de Holanda, hecho que le toca capturar en cámara para Teleanálisis.

Momentos más tarde, Gabriel (Mario Horton) se está deshaciendo de evidencia que lo pueda ligar a Claudia y finalmente llegan a su escondite varios agentes de la CNI, entre ellos, Pedro. Es ahí cuando se desata una balacera -en la cual Gabriel cuenta sólo con una pistola, mientras sus oponentes tienen ametralladoras capaces de traspasar las murallas-, que termina cuando el integrante del FPMR y pareja de Claudia muere a manos de Pedro.

Cuando la matriarca de los Herrera comienza a quebrarse definitivamente ante la incertidumbre sobre el paradero de Claudia, que Nancy (Katty Kowaleckzo) la convence de seguir adelante tras una charla en que le comenta convencida: "Si te echas a morir esta familia se va a las pailas".

Una vez de vuelta en la residencial donde tiene cautiva a la mayor de los Herrera, el agente de la CNI le muestra la cédula de identidad de su pareja a Claudia y ella comprende que ha muerto. Insensible al enorme sufrimiento de su supuesta sobrina, Pedro continúa su rutina mientras ella llora tirada en el suelo, aún amarrada a una silla.

Desesperado por la imposibilidad de ayudar a su hija, Juan termina comentándole al joven Félix cuál es el verdadero problema con su hermana -que desconocen su paradero-, y se produce una tierna y emotiva escena entre ellos. Mientras Juan admite que ha sido incapaz de proteger a Claudia, Félix le dice convencido: "No es su culpa, usted es un buen papá, el mejor del mundo. En serio, no puede arreglar todas las cosas".

Mientras Claudia llora sin tener mucha fe en su futuro, su familia reza unida, un detalle muy acorde al título del episodio: Cuando sólo nos queda rezar.

Finalmente, el milagro que los Herrera esperaban se produce. Cuando Pedro se apresta a entregar a Claudia a sus superiores, encuentra un papel que Juan le había deejado horas antes que dice: "Hermano estoy un poco preocupado por usted, comuníquese".

Tras decirle a Claudia: "Cabra de mierda, por qué no pensante en tu familia, gente buena, gente decente", Pedro la lleva a casa de sus padres.

En un sentido abrazo, Ana le pide perdón a Claudia por el distanciamiento y la familia Herrera se ve nuevamente reunida. No sin que Pedro le recomiende a Juan que saque a su hija de Santiago y que Herera, por su parte, lo interrogue sobre su verdadera identidad. A lo que Pedro responde escuetamente que era "su hermano".

Finalmente, se muestran las oficinas de la CNI donde el expediente sobre Claudia es archivado, además de verse al patriarca de los Herrera con su hija en el furgón con destino desconocido.