En el año 1976, al mismo tiempo que Pink Floyd introducía varios sonidos del mundo salvaje para su disco Animals (1977), el jazzista y multi-instrumentista brasileño Hermeto Pascoal grababa los gruñidos de cerdos en su álbum Slaves mass (1977), obra de capital importancia en la discografía de este músico del nordeste brasileño. Nacido hace 73 años en la localidad de Arapiraca, dentro de una familia campesina, Pascoal es incluso una rareza y un mito dentro de su propio país, donde ha colaborado fundamentalmente con Sergio Mendes y Airto Moreira.
El músico se presenta en Chile este viernes, en el Teatro Nescafé de las Artes, en una presentación que lo trae por segunda vez al país tras 15 años. Albino y con una larga cabellera y barba, Pascoal se hizo conocido en los 60 al mezclar folklore y jazz. En 1970, fue el propio Miles Davis quien lo llamó para colaborar en su disco Live-Evil, donde compuso dos temas. "Era un tipo maravilloso, virtuoso. Con un don que sólo Dios puede entregar", dice sobre el trompetista, quien alguna vez dijo que le hubiera gustado "reencarnarse en aquel músico brasileño albino".
Con 23 discos y dominio en al menos 12 instrumentos (sin mencionar su utilización de teteras, bocinas, botellas y juguetes de goma), Pascoal tocará en Chile junto a su septeto, donde también interviene su hijo. "En mis conciertos hay un 20 por ciento de improvisación y toda la participación del público que se quiera. Haremos un recorrido por todo el repertorio, que es muy grande", indica.
Pero este cultor de las mezclas y los sonidos varios ("No compro instrumentos, los encuentro. El sonido puede ser un cuchillo, el agua o una bolsa plástica") adelanta también su próximo disco, donde explora nuevas rutas. "Decidí, por un chequeo médico que debo realizarme, grabar mis órganos. Corazón, pulmón, hígado. Cada vez que me examinan no puedo evitar disfrutar de los sonidos que emito y como para mí esto es música, será mi próximo trabajo. No usaré instrumentos, sólo mi cuerpo y mi imaginación", explica.