El cambio climático, la pérdida de hábitat y la entrada de especies exóticas -y las enfermedades que ellas transmiten- son parte de los factores que hoy amenazan a los anfibios del mundo; en especial la Chytridiomicosis -un hongo que se ha esparcido por todo el mundo y puede provocarles la muerte-, y el ranavirus, que se multiplica en sus órganos internos y también los liquida. El primero ya está ampliamente distribuido en el país, mientras el segundo fue recientemente detectado por primera vez enChile.
Un estudio liderado por el investigador Claudio Soto Azat, director del Centro de Sustentabilidad de la U. Andrés Bello (Unab), detectó el virus en la rana chilena (Calyptocephalella gayi) un anfibio endémico, considerado un fósil viviente, pues es la única especie de un linaje que surgió hace más de 110 millones de años. Sus poblaciones están en franca declinación y la especie amenazada de extinción.
Hasta el momento, el virus ha sido detectado en Talagante y Maipú, en la Región Metropolitana, en zonas relacionadas con la agricultura y donde también se encuentra la rana africana (Xenopus laevis), sindicada como culpable, reservorio de los patógenos, a la que no afectan.
"Sabemos que el hongo está ampliamente distribuido en Chile, por lo menos hace cinco años, también comprobamos que la rana africana es reservorio de ambos patógenos, porque estas dos enfermedades no les produce nada, pero sí tienen posibilidad de causar enfermedad y mortalidad a los anfibios nativos", dice Soto Azat.
El ranavirus -que también afecta a peces y reptiles- se multiplica en los órganos internos de los anfibios, produce lesiones en su piel, como úlceras y hemorragias, lo que finalmente les produce la muerte.
"Es difícil enfrentarlo, pero lo primero es investigar su presencia e impacto, una vez que teniendo el diagnóstico se pueden diseñar medidas de mitigación que impidan la dispersión de los dos patógenos. Dentro de ellas está desinfectar los zapatos y otros equipos del publico e investigadores que visitan los parques", indica. Medidas que los parques privados Tantauco y Huilo Huilo han tomado para evitar la dispersión del hongo.
Erradicar a la rana africana es una tarea más difícil. La especie se ha expandido por todo el mundo, principalmente por su utilización en laboratorios científicos, desde donde ha escapado. Fue utilizada como test de embarazo desde los años 30 y hasta los 70. Es equivalente a los ratones de laboratorio, y todavía se utiliza para investigación en todo el mundo.
Un estudio de la Unab que intentó probar si es posible controlarla y erradicarla del Jardín Botánico de Viña, no lo logró, pues ya son muchas. "Logramos contar 1.200 en una poza pequeña de 86m2, lo cual es muchísimo", cuenta.