El juez del Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, Daniel Urrutia, decretó la medida cautelar de prisión preventiva para el detective de la Brigada Investigadora de Robos Metropolitana Oriente de la Policía de Investigaciones, Flavio Torres, quien hoy fue formalizado por apremios ilegítimos y delito informático.

El funcionario fue imputado por los supuestas torturas cometidas en contra de un alumno del Liceo Barros Borgoño, tras la marcha estudiantil del pasado 8 de mayo.

La fiscal de la zona Centro Norte, Ximena Chong, comunicó en la audiencia, que el joven fue agredido en el cuello y rostro, y fotografiado en ropa interior e interrogado por cerca de 10 policías, entre ellos el imputado.

La querella presentada por su familia, indica que lo habrían obligado a entregar su contraseña y nombre de cuenta en Facebook, con el objetivo de acceder bajo amenaza a " sus contactos y requiriendo de si los mismos habían participado en la marcha y que procediese a identificarlos", hecho que también fue mencionado por Chong.

La máxima de las medidas cautelares fue decretada pese a que el Ministerio Público no la solicitó, y el tribunal argumentó la determinación aludiendo a que el delito es grave, pues vulnera los derechos humanos.

SUMARIO ADMINISTRATIVO

A través de un comunicado de prensa, la Policía de Investigaciones aseguró que "conforme a la política institucional de absoluta transparencia, se dispuso una vez ocurridos los hechos la realización de un sumario administrativo –el que aún no finaliza- con el fin de establecer las responsabilidades del caso".

La institución además manifestó "su más absoluto compromiso con la justicia, Estado de Derecho y Código de Ética institucional, con el propósito de trabajar por la seguridad y justicia de todos los chilenos".