Después de que las autoridades de la entonces Unión Soviética ordenaran talar un bosque en la actual República de Sajá-Yakutia para construir algunos caminos, comenzó a quedar en evidencia un curioso cráter, que aumentó sus dimensiones con las grandes inundaciones de 2008, que afectaron a la zona.
En medio de las altas temperaturas que afectan al territorio, que forma parte de las Federación Rusa, el llamado cráter de Batagaika crece a un promedio de 15 metros por año.
En la zona, el fenómeno despierta ciertos temores, apoyados en supuestos ruidos y leyendas, que hablan de ser la puerta a otro mundo. En medio de la fascinación que despierta del cráter de Batagaika, un grupo de científicos se lanzó en la misión de analizar el fenómeno.
Los académicos internacionales del Instituto de Investigación Ecológica del Norte, llegaron a la primera conclusión, informa el medio The Siberian Times.
Antes se hablaba que el cráter tenía una edad de 120 mil años, pero los primeros resultados arrogan que data de 200 mil años.
Uno de los integrantes de la excursión, el profesor Julian Murton, de la Universidad de Sussex, afirmó que la información recabada “nos permitirá comparar los datos con otros fenómenos similares en Groenlandia, China y la Antártida. La información sobre la antigüedad de los suelos y la vegetación nos ayuda para reconstruir la historia de la tierra”, aseguró el académico al medio ruso.
Muerton agregó que “estaba sorprendido y emocionado al saber que podemos datar las muestras en 200.000 años. Las muestran indican que hace miles de años el clima en la región de Verkhoyansk fue el mismo que es ahora, y aún más caliente”.
Según señala el The Siberian Times, la zona de Batagaika es uno de los lugares más fríos del planeta, y compite con Oymyakon, de la misma región, por la zona habitado más fría del mundo.