Tres ciudadanos chilenos, dos peruanos y una boliviana componían una banda dedicada al tráfico de clorhidrato de cocaína internada desde Tacna, Perú, cuyos miembros fueron detenidos en Coquimbo por personal de la Brigada Antinarcóticos de La Serena. Ayer los sujetos fueron puestos a disposición del Juzgado de Garantía del puerto, para su control de detención.

La diligencia se concretó luego de una exitosa operación de compra simulada, realizada por un agente encubierto, en la concurrida Avenida Costanera, frente al Casino de Juegos de la ciudad. Dicha acción permitió atrapar al cabecilla del grupo, Francisco Javier Tapia Escalante (40), alias El Cazuela, quien registraba una orden de detención vigente del año 2004, emanada del Juzgado de Letras de Puente Alto, y antecedentes policiales por tráfico, robo y estafa.

Fue el mismo Tapia quien entregó los datos para desarticular al resto de la banda, integrada por Luis Guillermo Toledo Peralta (20), con antecedentes por receptación y Victoria Pilar Véliz Véliz (20), ambos chilenos; Chiany González Villanueva (33) y Reyna Isabel Vergara Chilca (40), ambos peruanos; y Sofía Rodríguez Zubieta (46), boliviana.

Se estableció que la droga era transportada desde Tacna hasta el paso fronterizo de Chacalluta, en Arica, y luego trasladada hasta Coquimbo, en donde era almacenada en dos domicilios del sector Sindempart. Allí se la dosificaba para su posterior comercialización en diferentes ciudades del país.

El allanamiento a las dos viviendas permitió la incautación de 4,083 kilogramos de clorhidrato de cocaína, un automóvil, 11 teléfonos celulares, ocho tarjetas bancarias y de casas comerciales, una chequera del Banco Santander-Santiago, una pistola de fogueo y una baliza azul, similar a las que usa la PDI, la cual pudo ser usada en presuntas quitadas de droga a bandas rivales.