Las autoridades argentinas detuvieron a un chileno que pretendía ingresar al país transandino con un cargamento de 310 dientes de tiburones extinguidos hace miles de años, informaron hoy fuentes oficiales.
El hombre, cuya identidad no fue difundida, fue arrestado en el paso fronterizo Cardenal Samoré, en la provincia argentina de Neuquén (sur), y fue imputado por tráfico ilegal de materiales fósiles y arqueológicos, dijo la Aduana argentina en un comunicado.
Al parecer, las piezas decomisadas pertenecen al patrimonio cultural del país y fueron extraídas del yacimiento paleontológico de Caldera.
El cargamento, avaluado en unos 100 mil dólares, iba a ser vendido en Brasil y Europa oriental.
La mayoría de los dientes fósiles decomisados fue hallado en un equipaje de mano, aunque otras piezas estaban adheridas al cuerpo del detenido.