Las autoridades mexicanas detuvieron en la fronteriza Ciudad Juárez a un presunto sicario de nacionalidad estadounidense al que acusan de haber cometido 18 asesinatos, informó hoy la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en un comunicado.
Michael Escatel, presunto miembro de La Línea, un grupo de sicarios a las órdenes del Cártel de Juárez, fue detenido por miembros del Ejército cuando intentaba colgar una pancarta del tipo conocido en México como "narcomantas", con las que los cárteles de la droga lanzan mensajes amenazadores contra las autoridades.
El detenido se encontraba en compañía de otros dos individuos, que lograron huir a pie en la persecución emprendida por efectivos militares, según la Sedena.
El presunto sicario, que fue capturado en posesión de un fusil marca Norinco, tiene antecedentes penales por el delito de tráfico de indocumentados en su país, donde fue detenido en junio de 2004.
Según la Sedena, Escatel ha participado en México en 16 hechos delictivos en los que perdieron la vida 18 personas.
Ciudad Juárez es la urbe más violenta de México y el año pasado fue escenario de 1.600 de los 6.000 asesinatos vinculados con el narcotráfico registrados en todo el país.
En lo que va de año los asesinatos relacionados con el narcotráfico superaron la barrera de los 5.000, según publicó hoy el diario El Universal, que lleva contabilizados 5.012 muertes.
De acuerdo con este diario, desde la llegada al poder del presidente Felipe Calderón, en diciembre de 2006, se han registrado 13.599 homicidios vinculados con el crimen organizado en el país.