El sargento Bowe Bergdahl, quien fue prisionero de los talibanes hasta su intercambio por cinco presos de la prisión de Guantánamo, había sido dado de baja de la Guardia Costera de EE.UU. por razones psicológicas, afirmó hoy el diario The Washington Post.

El canje de Bergdahl por cinco líderes talibanes que llevaban más de diez años en Guantánamo, efectuado tres semanas atrás, ha causado una controversia política en Estados Unidos, en parte porque el Gobierno del presidente Barack Obama no notificó por anticipado al Congreso sobre las negociaciones, como lo exige la ley. 

"La baja en 2006 y abundante material escrito por Bergdhal, incluido su diario personal junto con ensayos y cuentos, pintan el retrato de un joven profundamente complicado y frágil", indicó el diario, que obtuvo en exclusiva los escritos del militar.

Según el artículo, Bergdahl "luchaba por mantener su estabilidad mental desde el comienzo de la instrucción (militar) básica hasta el momento en que abandonó su puesto en el este de Afganistán". 

El Post informó que, pocos días después de que Bergdahl desapareció de su puesto militar, su amiga Kim Harrison recibió una caja que contenía el diario personal del soldado, su computador portátil y otros papeles. El militar había designado a Harrison como la destinataria de sus restos en caso de morir en la guerra. 

"Harrison dijo que decidió compartir el diario y los documentos con el Post porque está preocupada por la descripción de Bergdahl como un desertor calculador lo cual, según ella, contrasta con su visión de él como un joven sensible y vulnerable", agregó el diario.

Según los registros del Servicio de Guardacostas, Bergdahl salió de esa rama de las Fuerzas Armadas con una "baja sin calificación" después de veintiséis días de instrucción básica, término que se aplica a quienes son dados de baja sin haber completado ciento ochenta días de servicio.

El diario sugirió que el Ejército aceptó a Bergdahl en 2008 debido a las necesidades de personal que tenía por la existencia de dos guerras en marcha, Irak y Afganistán, en un período en el cual las Fuerzas Armadas aceptaban en sus filas a voluntarios que, en otras circunstancias, hubiesen sido rechazados.

La mayor parte de los escritos recibidos por el rotativo describen las reflexiones y dudas de Bergdahl, desde su primera anotación en el diario personal el 11 de junio de 2008, cuando el joven marchó a una instrucción básica del Ejército en Georgia, hasta el último mensaje electrónico fechado el 27 de junio de 2009, tres días antes de su desaparición.