Ser la número uno del mundo en el bodyboard es el sueño de Valentina Díaz. Chilena, 27 años, ocho del ranking el año pasado y top 10 en las últimas dos temporadas.

El sueño puede ser realidad. Lo demuestra venciendo las olas más complicadas del mundo. Lo hizo el fin de semana pasado, cuando terminó segunda en el prestigioso campeonato Mike Steward Pipeline Invitational 2017, en Hawai.

La prueba se realiza en la famosa ola Pipeline y reúne a los mejores del mundo en esta especialidad. "Fue un día histórico en mi carrera deportiva, es primera vez que un chileno está en el podio en la competencia más importante a nivel mundial de surf y bodyboard. Hawai es la Meca de este deporte, ademas de ser Pipeline la ola más peligrosa y respetada del mundo".

Las palabras de la oriunda de Puchuncaví resumen la importancia del certamen en las islas estadounidenses. Es su segunda edición y la primera fecha del circuito mundial en una ola legendaria y ante los mejores, pero apenas reparte mil dólares en premios (el resto entrega entre cinco y 10 mil) y no da puntos para el ranking anual.

Hace pocos días otro chileno, Tomas Bock, hizo historia al dominar la misma Pipeline con sólo 13 años, el sudamericano más joven en hacerlo.

"Tener un segundo lugar en esta competencia es el mayor logro de mi carrera deportiva. Hicimos historia y esto quedará para siempre", agrega la chilena desde Hawai.

Díaz es una de las mejores especialistas nacionales, y en 2015 tuvo otro hito histórico, al alcanzar la primera medalla de oro para Chile en unos Juegos Panamericanos de Surf, realizados ese años en Punta Rocas, Perú.

La siguiente fecha del World Tour, cuyos puntos ya serán contabilizados en el ranking mundial será del 14 al 25 de junio (fechas siempre tentativas a la espera de las mejores olas), en Itacoatiara, en Niteroi, Brasil.

La tercera y cuarta fechas se realizarán en Chile, en Antofagasta, del 27 de junio al 2 de julio; y en Arica, del 7 al 16 de julio, eventos que también contarán con varones. Seis eventos más completarán el calendario.

El boliviano Cristian Peralta, organizador de la prestigiosa fecha ariqueña, explica las dificultades del Pipeline: "El oleaje es bien difícil, son aguas pesadas, uno se queda semanas entrenando en Hawai para poder dominarlas y en competencia tiene algunos segundos. Es la ola más perfecta del mundo, donde cualquiera quiere tener un éxito".

Sobre el futuro de esta especialidad, la propia Díaz señala que "el bodyboard es un deporte nuevo, que gracias a los resultados internacionales lo hemos dado a conocer. Yo y un par más de chilenos estamos en los ojos del mundo y eso es algo de lo que Chile todavía no se da cuenta: somos potencia mundial".

El bodyboard, un nicho

El triunfo de Díaz en el Panamericano no es la única pista que lleva a pensar que el bodyboard es un deporte con proyección de buenos resultados para Chile. Las proyecciones miran ahora, más allá de las carreras individuales de Díaz y Alan Muñoz (ganador de una fecha mundial, en Portugal, en 2016).

Hace dos años, el equipo nacional se consagró campeón en el Mundial que se disputó en Iquique. Chile tiene opciones de medalla si se confirma el bodyboard en los Juegos Panamericanos de Lima 2019. En los Juegos Olímpicos de Tokio sólo habrá surf.

Tratar de mejorar las cosas desde la base es la idea de la nueva Federación Chilena de Bodyboard, que se separó de la de Surf. Su vicepresidente, Francisco Alvarado, asegura que "tenemos buenos resultados, tanto los de Valentina, Alan y cinco o seis junior que destacan en el circuito mundial. Falta el apoyo, pero ahora podremos pedir recursos para que todo se haga como se debe".