Un duro revés sufrió la negociación que durante la mañana de ayer sostuvieron trabajadores y representantes de la firma Puerto Central (PCE) para buscar destrabar la huelga que afecta al recinto portuario de San Antonio desde el sábado.

Diego Silva, representante de los trabajadores, llegó a la cita acompañado de un grupo de dirigentes del recinto portuario. La contraparte estuvo liderada por Consuelo Cánaves, gerente general de Muellaje Central (filial de PCE). Tras 45 minutos de diálogo la conversación terminó abruptamente, luego que las partes no concretaran un acuerdo.

El punto que trabó las conversaciones es el primero del petitorio entregado por la Federación de Trabajadores de Costanera Espigón (Fetraportces) a la empresa: el aumento en la remuneración de los turnos de noche.

La empresa considera que  los trabajadores, representados por Silva, no están respetando un acuerdo firmado hace cuatro meses por el propio dirigente sindical. "Este bloqueo pretende, a través de una medida de fuerza, modificar el contrato que Diego Silva firmó hace solo cuatro meses y que beneficia a los trabajadores eventuales del puerto" explicó Cánaves.

La funcionaria de PCE dijo que el contrato entre trabajadores y la empresa  "lo estamos cumpliendo al 100%" y agregó que todas las demandas planteadas  por los movilizados "son nuevas y no están en el contrato firmado".

Los trabajadores, por su parte, acusan que la empresa se opuso desde un primer momento a discutir las jornadas de los turnos nocturnos. "La señora se para y dice que ella no va a conversar ningún punto que tenga que ver con los valores de los turnos", dijo Silva. El dirigente portuario agregó que esta postura causó decepción en los trabajadores, quienes decidieron retirarse de la cita.

La movilización vivirá hoy una nueva jornada clave, cuando a primera hora se vuelvan a reunir representantes de la empresa y trabajadores para buscar un entendimiento.

Medidas

Si la mesa negociadora fracasa nuevamente, Silva anunció que con los dirigentes de la empresa Belfi, que construye la ampliación del terminal Costanera Espigón, frenarán sus obras en respaldo al paro, con lo que se buscaría paralizar de manera completa el puerto.

En tanto, dirigentes de los trabajadores de STI y Puerto Panul, los otros concesionarios privados de San Antonio, firmaron una declaración condenando el actuar de PCE frente a sus trabajadores, aunque anunciaron que no se plegarán a la movilización.