El jefe de la bancada de diputados de la Democracia Cristiana, Jorge Burgos, junto al diputado José Miguel Ortíz, integrante de esta instancia encargada de resolver las discrepancias, valoró el esfuerzo desplegado, "con cambios que apuntan hacia un sentido correcto", pero aseguró que "la verdadera reforma tributaria que requiere el país quedó pendiente y será una prioridad en el próximo periodo".
Al respecto Burgos, junto con agradecer la labor de los senadores Pizarro y Rincón y del diputado Ortíz, señaló que "lo dijimos desde un comienzo, Chile necesita un nuevo pacto fiscal, una reforma de verdad, que contribuya a responder a las necesidades sociales que tiene el país y a disminuir la enorme brecha de desigualdad que hoy genera un sinnúmero de problemas y legítimas demandas; este será sólo un ajuste".
"Por ello, este será sin duda un tema de la próxima campaña y del próximo gobierno, ahora se votará favorablemente en el entendido que se trata de acuerdos logrados con un gran esfuerzo, y que son positivos, pero indudablemente no son suficientes y eso hay que decirlo", destacó.
El diputado DC José Miguel Ortíz, en tanto , señaló que "se hizo todo lo posible, logramos, efectivamente, mantener nuestra postura de aprobar las alzas y rechazar las rebajas y sumamos otros cambios que implicarán una mayor recaudación, modesta claro está, porque lo que Chile necesita es mucho más. Nuestros cálculos señalaban que a lo menos se necesitaban cuatro mil millones de dólares, pero por lo menos logramos reducir algunas de las rebajas que beneficiaban a los sectores con más ingresos, lo que no nos parecía correcto en un proyecto que busca recaudar más".
La iniciativa, que busca establecer fondos permanentes para educación, básicamente, incluye una reformulación de la tabla de impuestos y la creación de un Fondo de Educación. Considera, además, un protocolo que permitirá mejorar la repatriación de capitales y la modificación al cobro de la tributación al tabaco. Además, se ha incluido un bono para taxistas y para transportistas escolares. Se acordó, además, ampliar el crédito tributario a la educación a las familias que tengan a sus hijos en establecimientos particulares subvencionados o municipales, extendiendo el beneficio hasta 100 mil pesos por hijo, con un tope de 66 UF.
