Una cifra cercana a $6.000 millones de pesos habrían gastado parlamentarios de la Cámara, en desembolsos que no tendrían directa relación con sus actividad, justificada en el ítem de honorarios a asesores.

Ciper revisó en detalle los archivos de la Cámara que registraron el pago de 1.613 contratos de asesorías externas solicitadas por los diputados entre 2012 y 2013. También analizó una muestra de los informes que acreditan la realización de estas asesorías y descubrió los flancos débiles de un sistema de pagos millonarios que, a pesar de los nuevos controles, sigue siendo precario.

REVISA LA INVESTIGACIÓN COMPLETA DE Ciper.